“Actualmente disponemos de seis contenedores (tres de reciclaje, dos de basura y uno de basura orgánica) y sistemáticamente nos encontramos contenedores rebosando y basura esparcida por toda la calle y aceras. Es muy incómodo pasear por esta zona, además de los olores que genera la basura al aire pudriéndose”. Esta es la queja de Ramón Seoane, un vecino del entorno de las calles Mieres, Noreña y Caveda, que afirma que son muchas las personas afectadas y molestas con la acumulación de basura, que se repite con frecuencia, según este relato.

“Tanto vecinos como transeúntes se quejan de esta situación desde hace años. Los operarios de Emulsa solo recogen el interior de los contenedores dejando la basura de la calle durante días, y la orgánica descomponiéndose genera unos olores muy molestos para el vecindario y los comercios cercanos”, detalla este hombre en su queja. Ramón Seoane añade: “Los vecinos estamos hartos de esta situación”. Según su explicación, los residuos son una constante en estos contenedores, pero también en otros próximos. Por este motivo, urge a la empresa municipal Emulsa a tomar medidas cuanto antes para evitar que la situación se repita de ahora en adelante. E insiste en que numerosos residentes de esta zona de la ciudad han manifestado su malestar a las autoridades municipales, sin encontrar por el momento respuesta.