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El Juzgado de Prendes Pando, en el punto de mira del Ayuntamiento para tener más locales

El Principado se abre a una venta del edificio al Consistorio a precio reducido en el caso de que quede desierta una nueva subasta

Imagen exterior del edificio de la calle Prendes Pando que albergará el Palacio de Justicia de Gijón. Juan Plaza

El Ayuntamiento de Gijón intentó llegar a un acuerdo con el Principado para hacerse con el viejo edificio judicial de Prendes Pando. Un acuerdo que no fructificó por la intención del gobierno autonómico de seguir adelanta con la opción de una venta vía subasta, pese a que ese procedimiento suma ya tres operaciones fallidas. Pero un acuerdo que todavía tiene una vía abierta.

“Se quedó en que si la subasta volvía a quedar desierta se podría optar a una compra directa a precio reducido”, desveló ayer la edil de Hacienda, y portavoz socialista, Marina Pineda, en contestación a una pregunta de la portavoz de Podemos-Equo, Laura Tuero, en el Pleno. Eso sí, teniendo en cuenta dos condicionantes. Uno que la ficha del Plan General de Ordenación lo que fija para ese edificio es su derribo para sacar adelante una edificación de viviendas. Y dos, que el Ayuntamiento desconoce el grado de deterioro que puede tener el inmueble, que lleva en total desuso desde 2013. “Lo primero que hay que ver es si se podría usar cn una rehabilitación sencilla o se tendría que derribar y volver a construir. Habría que ver el coste de lo uno y de lo otro y tomar una decisión”, explicó la socialista.

Lo cierto es que el Ayuntamiento tiene necesidades de espacio en la zona centro tanto para sus propios servicios como para cederlos a colectivos sociales. Pineda puso como ejemplo desde el comprometido traslado de la Casa de Encuentros de las Mujeres a la reubicación de Urbanismo y Obras Públicas, ahora en la vecina Casa Rosada. El edificio de Prendes Pando, en su actual configuración, ofrece 12.000 metros cuadrados repartidos en siete plantas, en una ubicación donde es muy difícil encontrar ese cantidad de espacio disponible.

Tras un fallido plan de permutas con el Ayuntamiento, el Principado sacó el edificio a subasta en 2016 con un precio de 10,2 millones. Nadie se interesó. Igual que dos años después cuando el precio de salida quedó en 8,6 millones. El último intento fue en 2020 y entonces la rebaja fue mucho menor ya que se ofrecía a 8,3 millones. En los últimos contactos con el Ayuntamiento, el Principado les dejó claro que ahora mismo su intención es repetir la subasta y que, en principio, parece haber cierto interés que puede garantizar que la puja no quede vacía.

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