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El dragado de las lagunas de Isabel la Católica comenzará tras la mejora de los edificios

La actuación en los estanques, que ganarán profundidad, es una de las más ambiciosas del plan de obras del parque, recién iniciado

El estanque principal de Isabel La Católica. Ángel González

El dragado de las dos lagunas del parque Isabel La Católica, uno de los proyectos más ambiciosos para recuperar el gran pulmón verde gijonés, podría empezar a ejecutarse antes de que termine el año. Con ese objetivo trabaja el gobierno local dentro del plan de mejoras por fases que proyectó allá por 2019. Para esta actuación se espera poder contar con fondos europeos y persigue la recuperación medioambiental de las lagunas de Isabel La Católica afectadas por cianobacterias. “Por lo menos queremos tener adjudicado el dragado y siendo optimistas empezar a ejecutarlo antes de final de año”, afirma el concejal de Obras Públicas y Proyectos de Ciudad, el socialista Olmo Ron.

El dragado de los estanques de Isabel La Católica fue uno de los proyectos que se quedó sin fondos asignados en el presupuesto de 2022. Se trata de una actuación clave para la recuperación medioambiental de las lagunas de Isabel La Católica, cuyo estado provoca las quejas de los vecinos de la zona. El fondo de los dos estanques es de escasa profundidad, de apenas medio metro. Se encuentra lleno de sedimentos, lo que provoca la proliferación de cianobacterias. “El objetivo es eliminar esos sedimentos y darle más profundidad a los estanques para evitar que eso suceda”, aclara el concejal.

El edificio de oficinas y vestuarios de Isabel La Católica. | | Á. GONZÁLEZ

El dragado de los estanques va ligado a otro proyecto de gran calado para la recuperación del parque Isabel La Católica como es la impermeabilización del canal de El Molín, un proyecto que debe redactar la Empresa Municipal de Aguas. “Hay una pérdida de agua y es un canal que realiza su aporte a los dos estanques. Este proyecto forma ya parte de los presupuestos para el 2022”, recuerda el concejal de Obras Públicas, para una obra que también se cuenta con empezar antes del 2023 y así pegar un buen acelerón a la recuperación del parque Isabel La Católica.

Recuperación por fases

La reforma del parque Isabel La Católica, ante la falta de presupuesto para ser ejecutada de una sola tacada, ha seguido un plan de obras que se ha dividido en actuaciones de menor calado. En el último año se han invertido 460.000 euros. En esa cifra se cuentan los 158.510 euros con los que cuenta la empresa Ovinorte para ejecutar la reforma de las edificaciones del parque. Esta reforma se centrará primero en la recuperación de las oficinas y de los vestuarios. Posteriormente se focalizará en el lazareto, el palomar, la pajarera y la pérgola. La obra tiene un plazo de ejecución de seis meses. Si todo va según lo previsto, todos estos edificios deberían lucir su remozado aspecto ya para el verano, en julio.

El palomar del parque. | | ÁNGEL GONZÁLEZ

El parque Isabel La Católica es un reclamo para los más pequeños. Por eso entre los planes de mejora se encuentra también el proyecto para mejorar los juegos infantiles, que costará unos 65.000 euros. El proyecto se encuentra en fase de redacción, pero promete colocar una buena tacada de nuevos artículos. “Hay una serie de juegos infantiles, que, dada su antigüedad, el fabricante ya no los tiene así que se van a colocar otros nuevos. No serán todos, pero sí una gran mayoría”, especifica Olmo Ron.

En fase de licitación también se encuentra la mejora del cierre del parque infantil de tráfico. Esta instalación, que data de 1964 fue remodelada ampliamente por última vez en 1998. Estuvo prácticamente sin actividad durante 2020 y buena parte del 2021 por la pandemia. Reabrió sus puertas a primeros de octubre, para volver a acoger visitas de los colegios y con una nueva flota de bicicletas.

A primeros de noviembre se realizó otra de las mejoras más demandas por los vecinos y usuarios del parque. Fue la renovación de las vallas de los estanques y del canal de El Molín. Muchas de ellas se encontraban en muy mal estado por el paso de los años y algunas de ellas habían cedido. El incidente más grave se vivió precisamente en junio de 2020 cuando una de las vallas se rompió provocando la caída de una niña pequeña al estanque. La inversión en este plan, que ya ha concluido, fue de 30.967 euros para colocar unos soportes más modernos y resistentes.

Entre esa batería de reformas de menor calado también se han realizado mejoras en jardinería, con el suministro de arbustos por cerca de 18.000 euros y una modificación del carril bici entre la rotonda de la avenida de Castilla y el río Piles para evitar cruces peligrosos entre peatones y ciclistas por unos 29.000 euros. Pero sin duda la gran modificación que se vio el año pasado fue la apertura de la ya peatonalizada avenida de El Molinón que aumentó en 12.000 metros cuadrados la superficie del principal parque gijonés.

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