La naviera Baleària está negociando con Armón Gijón la contratación de un segundo ferry rápido de la clase del “Eleanor Roosvelt” ya entregado por el astillero gijonés y que entró en servicio en mayo cubriendo la línea entre Denia, Ibiza y Palma de Mallorca. La compañía levantina está negociando ese segundo encargo al astillero gijonés debido al resultado comercial “muy satisfactorio” del “Eleanor Roosevelt” y por el nivel de satisfacción que expresado por los usuarios del mismo. La compañía destaca, entre otras cuestiones, el comportamiento excepcional de navegación y la estabilidad con mar adversa.

Con el “Eleanor Roosevelt”, un catamarán de aluminio con motores duales de fuelóleo y gas natural, Armón logró entrar en un mercado hasta entonces copado por los astilleros australianos. Con 123 metros de eslora por 28 de manga, es el barco más grande construido en el astillero de El Natahoyo desde que lo adquirió el grupo Armón.

El astillero gijonés se está haciendo cargo ahora de mejoras en este prototipo, que se están ejecutando en el astillero gibraltareño “Gibdock”, por un equipo que Armón ha desplazado hasta allí. En esta revisión de garantía –habitual en los contratos de construcción naval– se van a instalar en el barco dos hélices de proa que mejorarán sustancialmente la maniobrabilidad del prototipo en el atraque, donde su inusual eslora en ferris rápidos catamaranes, junto a la falta de pericia inicial de los capitanes –que ya ha mejorado–, había manifestado una cierta limitación en la maniobra con vientos que empujan o que alejan de la linea de atraque.

También se van a instalar unos interceptores laterales que obedecerán al piloto automático para mantener el rumbo y permitir mantener los jets de propulsión en posición de fijos, incrementando sensiblemente la velocidad del buque en condiciones de carga baja y media. Además se reforzará la planta eléctrica, para suministrar a las hélices de proa, y se garantizará su estabilidad. Los trabajos, iniciados en enero, se desarrollarán hasta marzo.

El nuevo encargo que Baleària negocia con Armón incluirá estas mejoras, así como cambios en la disposición general de áreas de pasaje, bodegas y la potencia de los motores.