Un informe de la Abogacía del Estado determinará si el Club Natación Santa Olaya puede seguir disfrutando en régimen de alquiler del terreno de la Autoridad Portuaria sobre el que se asientan buena parte de sus actuaciones o si tendrá que comprarlo para no perderlo, algo que impediría acometer las inversiones para ampliar la entidad en la parcela cedida por el Ayuntamiento de Gijón. Así lo aseguró ayer el presidente, José Enrique Plaza, en la asamblea general.
Plaza no quiso precisar cifras sobre la negociación con el Puerto, pero desveló ante los socios las cuentas de dos inversiones que considera inasumibles al mismo tiempo: los aproximadamente siete millones de euros en los que cifró las inversiones comprometidas en el convenio con el Ayuntamiento –5,25 millones incluyendo los 3,98 millones del convenio, el IVA, licencia de obras y elaboración del proyecto– más la compra de la parcela del Puerto “por bastante más del millón y medio de euros que pide la Autoridad Portuaria, señaló ante los socios.
La parcela ha sido tasada en 1,5 millones de euros, según informó este diario. El presidente del club señaló en la asamblea, en cambio, que el precio que les piden es “bastante más”, preguntándole a uno de los socios que intervino en la asamblea ofreciendo otra cifra, si contabilizaba o no el IVA. “Los bancos financian hasta el 70% de una inversión, ¿y el resto? Tenemos lo que tenemos de tesorería”, indicó, para señalar que son incompatibles ambas inversiones al mismo tiempo y que en caso de tener que elegir, optará por comprar la parcela portuaria.
Plaza ha presentado una alegación al Puerto con cuatro propuestas. Tres son que les den gratis los terrenos al ser un club de utilidad pública; que se los cobre en los 477.000 euros en los que los tasó un arquitecto (cifra sin validez, afirmó, al no ser sellarla una tasadora oficial) o que paralicen el proceso de desafectación del dominio público de la parcela, para mantenerla en concesión por los 8.000 euros anuales que ahora pagan. El presidente no se mostró optimista respecto a que fructifique ninguna de estas alternativas y recordó que el Puerto inició en 2018 el procedimiento para vender ese suelo a petición de la anterior directiva del club.
Queda la cuarta, pendiente de que dé el visto bueno la Abogacía del Estado, que sería un alquiler por diez años –a partir de octubre de 2024, cuando vence la concesión– por 17.000 euros al año, según lo que ha hablado con el Puerto. Un plazo suficiente para poder comprar entonces sin tener que renunciar ahora ampliar el club en la parcela del Ayuntamiento. Plaza explicó que la entidad oficial que efectuó la tasación para el Puerto valoró tanto el suelo como las construcciones sobre el mismo, que revierten al Puerto cuando vence la concesión. En caso de que no haya alquiler y el club no compre en el precio tasado, saldría a subasta al mejor postor, con lo que el club podría perder parte de sus instalaciones.
Plaza también anunció que a lo largo del primer semestre de esta año se contratará a la consultora que elabore el plan director para la ampliación del club, diseño que en último término tendrán que aprobar los socios en asamblea y para el que se les consultará previamente mediante encuestas. El presidente del Santa Olaya apuntó que con la campaña para captar socios se consiguió paliar parte de las 1.700 bajas que se produjeron entre 2020 y 2021, recuperando 172 antiguos socios y logrando otros 1.098 nuevos. En su informe, la directiva explicó que se han recuperado las actividades de natación, pero no las de sala.
