Con amplias mayorías, los socios del Grupo Covadonga respaldaron ayer el “austero” presupuesto elaborado para el 2022 por la directiva que preside Antonio Corripio para hacer frente a “otro año complicado” tras los dos de pandemia. Los grupistas también aprobaron holgadamente “una necesaria y ajustada” subida de las cuotas sociales, que, tras tres años congeladas, subirán entre 0,95 y 3,61 euros en función del carnet para hacer frente al aumento de los costes energéticos que atraviesa toda la sociedad. Lo hicieron en el Palacio de Congresos del recinto ferial Luis Adaro, donde asistieron un máximo de 323 grupistas y donde se recuperó el debate de dar nuevas altas tras seis años sin hacerlo. Un asunto que, por ahora, y tras el rechazo que la medida suscitó en el 2017 no se plantea la directiva de Corripio, pero que, como el propio presidente reconoció, es “un debate muy vivo”. “La directiva anterior dio en ocho años luz verde a 10.089 socios, que, si se multiplica por las cuotas de entrada, son unos recursos muy apreciados con los que la actual junta no cuenta”, valoró.

La asamblea sirvió para dar luz verde a la creación de una nueva sección, la de boxeo, que, tal y como avanzó LA NUEVA ESPAÑA, se convertirá en la número 27 tras haber experimentado un crecimiento exponencial de la demanda de esta actividad, que se ofrece en los cursos deportivos. Los socios también se interesaron por la situación de las instalaciones de Mareo, por los procesos judiciales del club contra el Ayuntamiento a cuenta de la supresión del anillo navegable para la renaturalización del Piles y por la renovación total del sistema de accesos del club, que, además de establecer un sistema de reconocimiento facial, implicará la creación de nuevas entradas a todas las sedes. También se pidió, lo hizo en el turno de ruegos y preguntas el socio Jaime Llorens, organizar un homenaje para la sección de tiro con arco que en el 2023 celebrará su medio siglo de vida. Pidió también renombrar el campo de entrenamiento como “Arquero José Fernández”, en homenaje a su impulsor.

La asamblea comenzó a las siete de la tarde y se prolongó hasta pasadas las nueve y media. Comenzó con la designación de la mesa moderadora. Se ofrecieron voluntarios Blanca María Lozano, José María Fernández y Margarita Gutiérrez. Esta última ejerció las labores presidenciales del órgano. El siguiente punto fue el debate de la Memoria de Actividades del 2021. Se aprobó con 238 votos a favor, 30 en contra y seis abstenciones. Los pormenores del grueso documento los radiografió Joaquín Miranda, el tesorero, que, entre otras cosas, avanzó que el club busca nuevos patrocinios y que se está próximo a renovar el firmado con Abanca, el más importante para la entidad.

En el turno de réplica hablaron varios socios. Entre ellos, Mariano de la Puente y Bibiana de la Puente, muy críticos, especialmente el primero, con todo lo que tiene que ver con la actual directiva. Salió a la palestra también Diego Fernández, que fue el que puso sobre la mesa la posibilidad de dar en el futuro nuevas altas “para que haya cierta renovación”. Esta cuestión ya la intentó la directiva de Corripio, cuando propuso sin éxito la entrada de 295 abonados de la lista de espera en 2017. También Víctor Díaz se mostró crítico con la gestión de Mareo, para la que llegó a pedir una zona nudista tras relatar un problema que tuvo una socia. De la gestión de Mareo a nivel general habló la vocal Elena Martín. Puntualizó que el plan especial para esta sede, donde se recogen propuestas de crecimiento y de cambios de instalaciones, ya está en fase de licitación. “Está en periodo de aprobación por nuestra junta”, concretó.

Los socios respaldaron el presupuesto de 12,74 millones de euros, y la subida de las cuotas. En este presupuesto se incluyen los gastos de personal actualizados a “la firma inminente” del nuevo convenio. El resultado de la votación fue 210 votos a favor, 41 en contra y 4 abstenciones. La necesidad de “actualizar” las cuotas la defendió la vicepresidenta tercera, Begoña Espasande. “Se destinan del presupuesto de 2022 1,2 millones de euros. Esta es la partida que más crece respecto al 2021, un 73,19 por ciento”, apuntó. Espasande, como antes hizo Corripio, recordó lo complicado que fue cerrar el anterior ejercicio con un superávit de 21.181,06 euros. Entre otros datos puntualizó que al club le queda pendiente de pago un capital de 2,9 millones de prestamos con bancos.

En este turno de réplicas, salió a colación el tema de la renovación del control de accesos. El presidente del club recordó que el 85 por ciento de esta inversión se destinará a crear nuevos accesos. Las Mestas pasará de tener cinco a nueve entradas. “Serán mejores entradas, con un ancho especial para carritos y para personas con movilidad reducida”, explicó Corripio, que avanzó que la sede de Mareo contará con una barrera en el parking similar a la que hay en Las Mestas y que, gracias a este sistema, se podrán liberar trabajadores de la sede de Begoña y de la sede de La Arena. Por último, los socios que quedaron presentes en la asamblea aprobaron por 147 votos a favor, 4 en contra y una abstención crear una sección de boxeo. Para salir adelante, dos tercios de los votos tenían que ser positivos. Así fue.