Un amplio despliegue en El Musel trató de averiguar este martes si un gran buque de carbón llevaba a bordo sustancias estupefacientes. Las autoridades locales tenían la sospecha de que el barco, que descargó en Gijón unas 50.000 toneladas de carbón, traía de contrabando cocaína. La búsqueda, que en principio no dio resultado, contó con la colaboración del cuerpo de la Guardia Civil y de agentes de incógnito de la Policía Nacional.
El buque salió ayer a media tarde rumbo a Las Palmas, pero había pasado el mes pasado por los puertos de Barranquilla y Puerto Bolívar, en Colombia. En marzo había estado también en Estados Unidos. En Gijón, acabó de descargar sus toneladas de carbón el mismo martes a última hora de la noche, a hacia las 23.00 horas. Todo ello en presencia de agentes que comprobaron toda la carga depositada en El Musel a cualquier tripulante que bajase del buque a tierra firme.
El barco implicado lleva bandera griega, mide 190 metros de eslora y 32 de manga, con un calado de casi siete metros. Se espera que llegue a La Palma el próximo domingo y, al parecer, las autoridades de todos los países citados están en contacto y coordinados para investigar a fondo la carga de un buque al que ya se le habrían requisado cajas con decenas de kilos de cocaína en otros puertos y que recogió, presuntamente, de Colombia. La operación de inspección de Gijón, sin embargo, se saldó sin hallazgos.
