Explosión de emoción. Gijón acogió ayer una jornada para recordar en lo que a graduaciones se refiere. Con la pesadilla de la pandemia ya solo como un mal sueño, decenas de bachilleres recibieron ayer su beca y su orla, los dos elementos que les acreditan haber superado la última fase de la educación antes de dar el salto a la mayoría de edad. Festejaron ayer por todo lo alto siete centros de la ciudad, desde el este al oeste y pasando también por Cimadevilla: El Corazón de María, Doña Jimena, Mata Jove, San Eutiquio, La Asunción, Montedeva y El Piles.
La del Corazón de María fue la más numerosa de todas ellas. Se graduaron 107 bachilleres en un acto que tuvo lugar en primer lugar en el salón de actos del centro. En los discursos intervinieron Sonia Álvarez, jefa de estudios; el padre de una de las alumnas, Ernesto Castaño; los estudiantes Sara Casado y Víctor Argüelles y el director, Simón Cortina. Posteriormente a la entrega de orlas y becas e imposición de insignias los asistentes pudieron disfrutar de la presentación audiovisual de la promoción graduada. Se vivieron momentos de muchísima emoción. A las 20.15 horas se celebró una eucaristía y la cena fue en el hotel Begoña Park.
La del Montedeva también fue emocionante. Se graduaron en el centro que dirige Miguel Marcos 48 estudiantes que, tras el término del acto protocolario, posaron todos juntos con su beca de color azul. También se vivieron momentos de mucha alegría y de emoción a la hora de recordar tantos momentos vividos.
La celebración del Doña Jimena tuvo lugar en el propio centro y en las caras de los estudiantes se pudo ver una sonrisa de oreja a oreja por vivir uno de los momentos más importantes de su etapa educativa. La del Mata Jove, en la que se graduaron 29 estudiantes, fue, por su parte en el Ateneo de La Calzada. La del Río Piles también fue muy numerosa y se celebró en el recinto ferial Luis Adaro. Mientras, en la del San Eutiquio la celebración fue doble puesto que se graduaron 98 alumnos de Bachillerato y otros 47 procedentes de ciclos formativos. La del colegio La Asunción se celebró en el centro e incluyó también una misa.
