Jesús María Garitaonandía Santiago es el director técnico de la Confederación Hidrográfica del Cantábrico. Fue uno de los ponentes en la jornada que ayer organizó el Ayuntamiento sobre la renaturalización de ríos urbanos y la del Piles. Esta última opta a fondos europeos para financiar el 95% de los 4,5 millones de presupuesto.
–¿Ve probable que el proyecto de renaturalización del Piles logre financiación de fondos europeos a los que ha optado?
–Se han presentado más de 200 actuaciones de todo el país. Depende de lo que hayan presentado el resto. Pero sí que prevemos que tenga muchas posibilidades de salir elegida. Tiene posibilidades, porque cumple requisitos de la subvención, además de que está incluido dentro de otra estrategia de mayor rango que es la planificación hidrológica y el plan de gestión.
–¿Cómo valora técnicamente el proyecto para el río Piles?
–A nosotros aún no nos ha llegado. Una vez que sea elegido para ser financiable, el Ayuntamiento tendrá que trasladarlo a la Confederación para que sea autorizado, porque se hacen obras tanto en dominio público como en zona de policía. En ese momento es cuando se podrá hacer una valoración más concreta de la actuación, que encaja perfectamente dentro de la filosofía de la Confederación y del Ministerio de la restauración de ríos en zona urbana. Será una mejora sustancial.
–El proyecto ha generado polémica por la eliminación del anillo navegable, clave para la práctica deportiva.
–Las presas están en el ámbito competencial de costas, no en el nuestro. En todo caso, cualquier eliminación de azud tiene dos beneficios; mejora la conectividad de las especies y disminuye el riesgo de inundación. Imagino que los redactores del proyecto lo habrán tenido en cuenta.
–¿Han hecho alguna sugerencia al Ayuntamiento?
–Hemos estado reunidos con el Ayuntamiento y con el Grupo Covadonga, pero no hemos hecho ninguna sugerencia. Ellos son quienes han hecho análisis y propuestas.
–¿Qué les planteó el Grupo?
–Nos vinieron a exponer su problemática, pero no nos compete; es gestión del municipio.
–¿Son labores complejas las obras en los cauces?
–En cada entorno es distinto. Hay algunas en las que la población está muy encajada dentro de la vega inundable y tiene una solución técnicamente complicada y otras como el caso del Piles, donde la solución técnicamente no es muy complicada, porque lo que se plantea es mejorar la conectividad y el hábitat fluvial, eliminando el azud y los encauzamientos verticales.
–Hablemos de salubridad.
–Donde está el problema es en la zona marítimo-terrestre, también con el tema de las playas. En nuestro caso, la Comisaría de Aguas está revisando la autorización de vertido de los alivios de la red de saneamiento de la zona este de Gijón, esta zona del Piles, marcando plazos para mejorar esas instalaciones.
–¿Qué es lo que plantean?
–La Empresa Municipal de Aguas (EMA) prevé mejorar sus instalaciones para controlar alivios en época de lluvia. Se está revisando la instalación aguas arriba para ampliar tanques y controlar que los alivios se hagan cuando se produzca un cierto nivel de dilución. Es lo mismo, a otra escala, que con el pozo de tormentas. En todo caso, el Piles no está mal aguas arriba.
–¿Por qué se concentran los problemas en el curso bajo?
–La mayor parte de la población está ahí y el saneamiento se concentra en el punto bajo. Además, en la cuenca alta también hay menos problemas porque el terreno filtra las lluvias, pero en la zona que está urbanizada se concentra todo en la red de saneamiento.
–¿Y la depuradora del Este?
–Está previsto recibir la obra a finales de mes. Nuestra idea es seguir gestionándola con medios propios, a través de Tragsa, hasta que se la entreguemos a la administración competente. No hay un plazo fijado. Está pendiente de la modificación de la encomienda de gestión con el Principado y el Ayuntamiento para el saneamiento de Gijón, porque ha habido cambios normativos.
–¿Qué tal está funcionando?
–Al cien por cien desde finales de enero, cumpliendo los parámetros de calidad europea.
–¿Cómo va la obra de mejora la depuradora del Oeste?
–Estará lista para mediados o finales de 2023. Actualmente está ejecutado un 25% del contrato.
–¿Qué avances hay en el convenio para coordinar las actuaciones con el Ayuntamiento en tramos urbanos de los ríos?
–Ha informado favorablemente la Abogacía del Estado y estamos pendientes de los informes de los ministerios de Política Territorial y Hacienda.
–¿Y el estudio de las masas de agua en el concejo?
–Lo realizamos de la mano del Ayuntamiento. Estamos recopilando información, incluyendo vuelos con drones, para analizar los trabajos posibles. La previsión es concluir el estudio en julio y abrir un debate y participación, consultando a otras administraciones y a vecinos.
–¿Cuánto invierte la Confederación en conservar cauces en Gijón?
–El año pasado 495.000 euros en 16 actuaciones. Este año ya hemos hecho un trabajo y tenemos dos más en marcha en el río Pinzales y en el Piles a su paso por Granda. Hasta que no se firme el nuevo convenio no podemos concretar más.
