La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Sanz Montes aplaude el “carisma claretiano” en la misa del centenario

Los Hijos del Corazón de María expresan su “agradecimiento” por cien años en la ciudad

5

En imágenes: Misa del arzobispo de Oviedo en el Corazón de María Irene Sirgo

Como “un humilde franciscano”. Así celebró ayer el Arzobispo de Oviedo, Jesús Sanz Montes, el “cumplesiglo” de la presencia claretiana en Gijón. La máxima autoridad religiosa presidió ayer una misa en la iglesia del colegio Corazón de María en un acto que fue uno de los platos fuertes dentro del programa de actos conmemorativos del centenario de la llegada de la Congregación de Hijos del Corazón de María a Asturias. Sanz Montes reconoció “el carisma claretiano” ante un templo que prácticamente se llenó entre miembros del profesorado del Corazón de María, alumnos, familias y feligreses.

La celebración comenzó con una breve introducción de Aitor Castaño, el coordinador de pastoral del Codema, que hizo un breve repaso histórico de la llegada de la congregación a Gijón, el 14 de marzo de 1922, inicialmente para dar asistencia pastoral a lo que era el barrio de El Llano, hasta la actualidad.

En su intervención, Sanz Montes habló de cuando San Antonio María Claret estuvo en Gijón en el verano de 1858 acompañando a la reina Isabel II, de la que era confesor. Y también de los primeros días de la congregación en la ciudad. Hizo hincapié en las vocaciones que han surgido del Corazón de María, citó algunas, entre ellas las del padre Simón Cortina, director del colegio y presente ayer durante la eucaristía. El prelado también reflexionó sobre lo que es educar y recordó que significa “acompañar”, permitiendo que las personas “descubran y vivan” aquello que más le corresponde. Un punto de vista que encaja bien con la filosofía del Corazón de María, donde el alumno es el protagonista precisamente de la educación.

La cita contó con la presencia de Juan Lozano, Arcipreste de Gijón, y con Adolfo Lamata, Superior Provincial de los Misioneros Claretianos de Santiago, que habló en nombre del resto de sus hermanos al decir que tenía el “corazón agradecido” por estos cien años.

Compartir el artículo

stats