Los colegios Begoña y Laviada perderán un aula de 3 años a partir del curso próximo al no haber llegado al nivel de matriculaciones exigido para mantener su actual situación. La decisión, ya conocida en las directivas de ambos centros, de la Consejería de Educación ha irritado a las familias de los dos centros, que barajan medidas para recuperar el aula perdida. Los padres del centro de Viesques recogerán firmas desde el lunes y han enviado un escrito al Principado plasmando su “malestar”. En el de Laviada, la dirección del centro confirma que la asociación de madres y padres ya está moviendo el asunto con la federación que aglutina al resto de asociaciones familiares.

La pérdida de aulas se explica por la baja natalidad. El temor que tienen los padres en el colegio Begoña es que el cierre de esta clase implique que para otros años haya niños que tengan que irse a otros centros, entre ellos los concertados. Esto se explica porque para el curso que viene el Begoña logró 23 solicitudes de plaza para 46 espacios disponibles, repartidos en dos clases. Estos números implican que el año que viene tendrán solo una clase de 23 alumnos en vez de dos, con un ratio que no permitiría admitir a más estudiantes en ese aula. En la misma área hay otro centro público, Los Pericones, que también tendrán una sola clase de 3 años con veinte alumnos. “Esto derivará en que tengan que ir a un concertado. Queremos que siga habiendo oferta pública de educación en Viesques”, apunta Beatriz Parente, una de las madres que lidera las protestas en el centro.

Este grupo de padres conoció hace pocos días la decisión del Principado, que ya había sido comunicada hace varios días a la dirección del Begoña. La idea es comenzar a recoger firmas a partir del lunes en las entradas y salidas del colegio. Pero también se quiere involucrar al barrio y ya se han puesto en contacto con la asociación de vecinos para repartir hojas de firmas por los comercios.

Por su parte, el colegio Laviada, uno de los centros públicos con más alumnos de la ciudad, pasará a ser de línea 3 a ser de línea 2 el año que viene a partir de los 3 años. Este centro logró 40 preinscripciones para un total de 60 plazas. “Nos llegó la información por carta. Vamos a ver cómo podemos seguir apostando por tener tres clases. La AMPA ya lo ha puesto en conocimiento de la Federación Manuel Virgos”, comentó la directora del colegio, Ana Romero. Por otro lado, el colegio Pumarín, que logró 26 preinscripciones para 46 plazas espera recuperar un aula y volver a ser de línea 2.