El tono cristalino del mar ha vuelto a bañar la costa de Gijón desde hace un par de veranos, en el que las playas presentan una calidad de las aguas de baño excelentes, a tenor de los resultados de los análisis que durante el verano, de junio a septiembre, se realizan semanalmente desde el área municipal de Medio Ambiente. Los últimos indicadores, tal y como desveló LA NUEVA ESPAÑA esta semana, reflejaban esa misma tendencia, a principios de este mes, en los doce puntos de muestreo –dos en El Arbeyal y en Poniente (lado oeste y este de cada playa), cinco en San Lorenzo (a la altura de las escaleras 4, 8 y 12 además de las zonas de Vahones y Rinconín), y uno en Estaño, Serín y Peñarrubia–. Bañistas y técnicos coinciden en que la mejoría, a excepción de casos puntuales tras fuertes tormentas, está en las actuaciones en el cauce del río Piles así como en la puesta en funcionamiento del pozo de tormentas de Hermanos Castro y, al margen de las competencias municipales, la depuradora del Este. Desde el Ayuntamiento, entre Medio Ambiente y la Empresa Municipal de Aguas (EMA), en lo que va de mandato, se han realizado 1.830 muestras e intervenido en equipamientos y casas situadas en el cauce, y la red de saneamiento para evitar vertidos. Además, este lunes se retoman las inspecciones a explotaciones ganaderas, que han dejado ya una sanción.
Muestreos. Para identificar las zonas con problemas y averías en la red de saneamiento y en las viviendas e instalaciones públicas y privadas con vertidos directos al río se realizaron 1.830 muestras en 145 días por parte del laboratorio del servicio de Medio Ambiente.
Actuaciones ya completadas. Desde la elaboración del informe elaborado desde el área de Medio Ambiente sobre el estado actual del río Piles, la eliminación de vertidos directos a la red de aguas pluviales ha permitido identificar y eliminar el problema en quince viviendas que estaban conectadas directamente al río.
En cuanto a los equipamientos situados aguas abajo, se llevaron análisis en el recinto ferial Luis Adaro, en el campus universitario, en el Club Hípico Astur (Chas), en el completo de Las Mestas y en el estadio municipal de atletismo, en el Grupo de Cultura Covadonga, el Club de Tenis, en el rastro. También en emplazamientos municipales como el Palacio de los Deportes y de La Guía. Se encontraron defectos en la red de saneamiento en Las Mestas, el Chas y el recinto ferial, pero en los tres casos se han llevado a cabo las reparaciones pertinentes.
Hay que sumar el informe sobre la salubridad de las aguas continentales y litorales de Gijón, tras convenio con la Universidad de Oviedo, que encara su segundo año de convenio. Además, está la rehabilitación y renaturalización del curso bajo del Piles y el Peñafrancia se adjudicó a la empresa Taxus Magnadea, un proyecto pendiente de financiación europea.
Próximas medidas: del arroyo Pisón al parque de Isabel la Católica. Los muestreos realizados permitieron detectar problemas de saneamiento en la desembocadura del arroyo Pisón, por lo que se llevará a cabo un saneo y limpieza de la zona. La EMA va a ejecutar una obra de renovación y reparación del colector del Peñafrancia. El proyecto está en el Principado, pendiente de que se licite la obra.
La limpieza del Canal de Molín, por su parte, precisa de labores de limpieza e impermeabilización. También se llevará a cabo el dragado de los estanques del parque de Isabel la Católica y se llevarán a cabo obras de mejora de la red de colectores del parque. Medidas pendientes de que la EMA redacte el proyecto.
Como objetivos cumplidos, la EMA y Medio Ambiente han llevado a cabo la conexión de las aguas de drenaje procedentes del túnel del metrotrén al canal del Molín, una actuación que permite aumentar el caudal en el tramo final del canal del Molín, mejorando el aporte del agua a las lagunas del parque.
Inspecciones de Vigilancia ambiental. En estos últimos años se ha intensificado la vigilancia llevada a cabo por Policía Local, EMA, Medio Ambiente y la Confederación Hidrográfica del Cantábrico. Seis han sido los vertidos identificado, trasladándose los casos a CHC, que ha abierto expedientes sancionadores. Uno de ellos se resolvió con una multa de 1.500 euros a una empresa.
Ganaderías. Las actuaciones aguas arriba en el río implican la inspección de explotaciones ganaderas, tal y como adelantó este periódico. La primera inspección se ha detectado que se carecía de licencia y que existían graves defectos en el tratamiento de estiércoles y purines.
Este lunes, día 13, se retomarán, tanto el Seprona como la Policía Local, las inspecciones a un total de 30 explotaciones ganaderas.
