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Barbón y Zapatero, de la mano en Gijón para ensalzar a Azaña como referente y "el político más culto"

El presidente regional muestra preocupación por el avance de la intolerancia | El expresidente nacional apunta que impulsó la ley del matrimonio homosexual "por el amor sin más"

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Zapatero saluda a Ángeles Flórez, «Maricuela», en presencia de Adrián Barbón, Sonsoles Espinosa y la alcaldesa de Gijón, Ana González. Juan Plaza

Tarde en Gijón de novela negra, halagos mutuos y reivindicación del socialismo. La figura de Manuel Azaña unió ayer en la ciudad al presidente del Principado, Adrián Barbón, y al expresidente del Gobierno central, José Luis Rodríguez Zapatero, en la presentación de “Retrato de un desconocido. Vida de Manuel Azaña”, de Cipriano de Rivas Cherif. Mucho público en la Carpa del Encuentro, entre ellos la alcaldesa de Gijón, Ana González y otros militantes del partido. Todo rubricado con aplausos calurosos en una calurosa tarde de sopor veraniego.

“No nos podemos permitir que la memoria de Azaña caiga en el olvido, en tiempos en los que los populismos de extrema derecha campan a sus anchas, la figura de Azaña emerge con más fuerza que nunca”, recordó Adrián Barbón sobre el presidente de la Segunda República. “Los políticos de hoy necesitamos tener buenos referentes del pasado. Y Azaña murió porque se le rompió el corazón por sufrir por España”, añadió.

Zapatero, autor del prólogo del libro, fue contundente al recordar su figura: “Es el político más culto de nuestra historia. Es un justo homenaje. Si Azaña no despierta interés, atención, respeto, es que nuestro país pierde inquietud y lucidez”. Y añadió también, en referencia a que está enterrado en Francia: "Todos los países necesitamos referencias, símbolos. Aún no hemos reconocido a toda esa gente que tuvo que irse de España para defender la democracia y la libertad".

El paso de ambos políticos por Gijón sirvió para analizar algunas claves del panorama actual. "Estoy preocupado con los avances de intolerancia, el insulto permanente y la crispación. Es algo contra lo que nos tenemos relevar, seguir esa constante de la vida de Azaña de ‘Paz, piedad y perdón’", destacó Barbón. "Es el día del Orgullo, impulsé la ley del matrimonio homosexual, por el amor sin más, sin condiciones ni prejuicios. Descubrí a Borges con 15 años, cuando leí su primer cuento, un cuento de amor. Borges me sugirió amor a las palabras y a las personas, y es algo muy necesario", destacó Zapatero.

El expresidente, que estaba acompañado por su esposa, Sonsoles Espinosa, se mostró muy cariñoso con Ángeles Flórez “Maricuela”, presente entre el público. “Es una alegría ver compañeros veteranos, defensores del pensamiento de la izquierda, que nos siguen dando lecciones con 103 años”, recalcó.

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Arranca la Semana Negra en Gijón JUAN PALZA / FERNANDO RODRÍGUEZ

Tratándose de hablar de historia y del partido del puño y la rosa, no faltaron tampoco en la jornada momentos para el intercambio de flores. “Es una satisfacción estar con Adrián Barbón", soltó Zapatero. "Uno se congratula de que haya relevo generacional en personas como él. Aúna dos grandes cualidades: siente lo que te dice y tiene convicciones”. Haciendo gala de su clásico entusiasmo verbal, Zapatero se embaló hablando de la figura del líder del PSOE asturiano, al que ve revalidando su posición como presidente regional. "Me siento muy orgullosos de que este tipo de políticos tomen el relevo entre los socialistas. Ya lo verán cómo va a ganar”, destacó entre sonrisas al inicio de la charla que ambos mantuvieron, moderada por Miguel Barrero, periodista, escritor y director de la Fundación Municipal de Cultura de Gijón.

Poco antes de este encuentro ya Zapatero, preguntado sobre la posibilidad de que Barbón relevara en el futuro a Pedro Sánchez en el partido, como ya deslizan los mentideros del panorama político interesados en la búsqueda de sucesor –incluso Miguel Ángel Revilla, presidente de Cantabria, llegó a decirlo–, el expresidente del país fue cauto. “Ahora no toca”, respondió el leonés.

Y por si faltaba algo durante el coloquio, de postre otro dulce hacia el presidente asturiano a propósito de sus dotes de tertuliado. “Le vi el día de las elecciones andaluzas en la televisión. Me fui mejor a la cama a pesar del resultado. Estaba sosegado, como un demócrata, si fuera otro partido pondría excusas o malos ejemplos, es la democracia”, subrayó. Complicidad de libro en la Semana Negra.

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