Las cuatro manzanas de la cultura alternativa: así es la zona de Gijón donde bullen negocios "distintos"

Los comercios que impulsan la creación, en auge en la calle Marqués de Casa Valdés y alrededores: "Vivimos un buen ciclo"

Tono Permuy, en el Toma 3, con Marqués de Casa Valdés al fondo.

Tono Permuy, en el Toma 3, con Marqués de Casa Valdés al fondo. / Ángel González

Pablo Palomo

Pablo Palomo

Si Fomento es la zona de copas y Cimadevilla el bohemio casco histórico, el tramo inicial de la calle Marqués de Casa Valdés y sus aledaños se han convertido en la "milla de oro" para los negocios de cultura alternativa. Un enclave donde tan pronto se puede leer la última novela de Cartarescu como ir a un taller de escritura o a una exposición de Juan Genovés. Este céntrico rincón ha experimentado un auge de locales "originales", con visión común y voluntad colaborativa. Casi gremial. Buscan reanimar la asociación cultural La Dinamo, paralizada por la pandemia, y hablan ya de organizar unas fiestas populares en la zona. Entre otros negocios, forman parte de este cogollo las librerías café Toma 3 y La Revoltosa, la Librería de Bolsillo, la galería Aurora Vigil-Escalera y Les Cigarreres, un restaurante y punto de encuentro cultural y asociativo recién abierto en este lugar que vive al margen del "mainstream" gijonés. "Aquí hay muchísimo potencial", explican los responsables de estos locales.

Desde hace una década, Tono Permuy lleva el Toma 3, la primera librería café de Gijón. El establecimiento ofrece literatura, charla amena y casi un acto cultural gratuito al día. Es el que pone encima de la mesa la idea de revivir a La Dinamo y alumbrar las fiestas populares. Recuerda que el lugar no siempre fue así, que antaño era una zona solo de cervecerías. Algunas siguen al pie del cañón. Es consciente de que la calle, tras la pandemia, va para arriba. "Las ciudades y las zonas tienen sus ciclos y ahora estamos en uno muy bueno", comenta. "Debemos romper la idea capitalista de que el compañero es la competencia. No creemos en eso, todos tenemos las mismas inquietudes y los mismos problemas ¿Por qué en Barcelona todas las tiendas de cómics están en el mismo sitio? Hay que trabajar más como zona", añade.

Celebrando su noveno aniversario están en La Revoltosa. La librería café de la calle Juan Alonso apuesta por el ensayo político de izquierdas y feminista, pero sin descuidar la narrativa y la literatura infantil. La llevan Verónica Piñera y Oriol Díez, que comparten la visión de Permuy. "Ni pensamos que el hecho de que haya negocios parecidos reste clientes ni es algo que pase en la realidad. Nos ayudamos mucho entre nosotros y la zona se está poniendo muy guapa. Cuantos más negocios abran con esta misma idea, mucho mejor", desgrana Piñera.

A este reverdecer de laures contribuyen locales como el Dilema y el Tizón, que ofrecen música en directo por la tarde y a primera hora de la noche. El potencial del lugar lo olfatearon bien en la Librería de Bolsillo, que empezó hace 16 años en la calle Adosinda y que cuando tocó mudanza no se fue muy lejos: a Marqués de Casa Valdés. Es una librería que tiene más ensayo que narrativa, presentaciones semanales de libros y uno de los talleres de lectura y escritura más longevos de la ciudad. El joven Antón Tejeiro ejerce a sus 23 años de "portavoz" de este negocio. "No queríamos cambiar de zona porque tenemos una clientela muy afín y es una zona muy de paso. No me cambio por ningún local de otra parte del Centro", cuenta el joven.

Hablar de Aurora Vigil-Escalera es hablar de una galerista consagrada. Tiene local en la esquina con la calle Capua y otro en el madrileño barrio de Salamanca. Se encuentra ahora en Miami, donde participa en Art Miami, una prestigiosa feria de arte. En el local atienden estos días varios trabajadores, como Beatriz Zapico. Abrió en 2015, pero lleva tres décadas dedicándose al arte. "Elegí la zona porque está en el corazón de la ciudad. El entorno, poco a poco, se va haciendo con el posicionamiento de negocios culturales. La unión hace la fuerza y se está creando un núcleo cultural diverso e interesante", evalúa Vigil-Escalera.

Sara Combarros es una de las responsables de Les Cigarreres, en la calle Eladio Carreño, un restaurante con espacio para la cultura y el asociacionismo que acaba de abrir. Lo impulsan los colectivos Ama Asturies, La Folixaria y Entamar. "Cuando decidimos instalarnos aquí, hace un tiempo, recibimos apoyo de los negocios que ya están", explica sobre el entorno del primer tramo de Marqués de Casa Valdés, donde cuesta encontrar carteles de "se alquila". Por algo será.

Suscríbete para seguir leyendo