La obra en Isabel la Católica da un gran salto con el llenado del estanque pequeño

Paso de gigante en la regeneración del parque Isabel la Católica. La Empresa Municipal de Aguas de Gijón (EMA) ya ha concluido la obra de extracción de lodos del estanque pequeño, que comenzará a llegar con agua la próxima semana. La laguna, ya saneada, estará lista a tiempo para acoger a las aves que utilizan el parque gijonés en la época de anidamiento, a punto de comenzar. Este estanque tiene una superficie de 2.502 metros cuadrados, una cuarta parte de la laguna mayor, cuya superficie es de 10.630 metros cuadrados. El llenado de agua tardará en completarse varios días, utilizando la tubería que conecta el canal del Molín con el estanque pequeño, que ya está en funcionamiento, aunque el canal ahora tiene poco caudal y es posible que se necesite aportar agua desde el exterior para acelerar el llenado de la laguna.

Sólo de este estanque se han extraído 1.200 metros cúbicos de lodos, que se han depositado en torno al estanque de mayores dimensiones, a la espera de la elección del vertedero al que se tendrán que enviar. Esto último dependerá de la tipología de los lodos, si son inertes o si no lo son, en cuyo caso requerirán de un vertedero con medidas especiales para evitar filtraciones de los materiales que en ellos se depositan a los acuíferos subterráneos, fundamentalmente. La EMA está pendiente del resultado de un análisis para determinar si ese fango es de un tipo o de otro.

El parque de Isabel la Católica inicia el primer dragado de sus estanques en 40 años

El fin de los trabajos en el estanque pequeño dará paso al inicio de la extracción de los lodos del de mayores dimensiones. Las labores de retirada de lodos pueden realizarse mientras se espera a conocer las características de los lodos, dado que esto último sólo es necesario para conocer el tipo de vertedero necesario. La EMA había previsto inicialmente dragar los estanques mientras aún había agua en los mismos, pero finalmente optó por otra técnica más sencilla, como es haber esperado a la desecación de las lagunas para extraer el material del fondo de las mismas.

La retirada de los lodos –que entre los dos estanques del parque se prevé que sumen unos 8.442 metros cúbicos– permite ganar profundidad en las lagunas, lo que unido a un mayor flujo de agua hacia las mismas a través del Canal del Molín, con el agua extraída del túnel del Metrotrén fundamentalmente o con otras aportaciones si es necesario, permitirán evitar la proliferación de cianobacterias, que crecen mejor en aguas poco profundas y estancadas. Las cianobacterias de las lagunas, que acababan siendo arrastradas al río Piles y de ahí a la playa de San Lorenzo eran una de las causas de que se produjeran episodios de espumas contaminantes en el principal arenal gijonés.

Este factor de contaminación del río se eliminará con los trabajos que se están efectuando ahora en las lagunas del parque de Isabel la Católica. La obra en los estanques del parque gijonés que corre a cargo de la EMA tiene un coste global cercano al millón de euros. Además de acoger aves acuáticas que residen de forma permanente en el propio parque, los estanques de Isabel la Católica también son un refugio habitual para especies migratorias.

Suscríbete para seguir leyendo