El PP tiende la mano para un pacto de la derecha: "Gijón ha votado por el cambio"

Ángela Pumariega celebra sus cinco ediles "sin triunfalismos" y pide "altura de miras" al resto de grupos: "Somos llave de gobierno, decisivos"

Ángela Pumariega, en el centro, celebrando con compañeros y simpatizantes sus cinco concejales, ayer, en la cafetería bajo la sede del PP en Álvarez Garaya. | Marcos León

Ángela Pumariega, en el centro, celebrando con compañeros y simpatizantes sus cinco concejales, ayer, en la cafetería bajo la sede del PP en Álvarez Garaya. | Marcos León / S. F. Lombardía

"Gijón ha pedido un cambio y somos decisivos para ello: somos llave de gobierno". Una por momentos emocionada Ángela Pumariega, candidata a la Alcaldía del Partido Popular, celebró con estas palabras los cinco concejales de su partido con la satisfacción de ser, a su juicio, "clave" para el próximo mandato. Sin ninguna petición concreta a Foro y Vox, la líder popular sí pidió "responsabilidad y altura de miras a otras fuerzas para saber interpretar" los resultados de unas elecciones que, aseguró, reflejan que "Gijón quiere un cambio de siglas pero, sobre todo, un cambio de políticas". Celebró también la cabeza de lista "el mejor resultado de la historia del bloque de la derecha", lo que para ella podrá servir para "poner fin a un gobierno de izquierdas que ha sido el peor gobierno local de la historia de Gijón". Tendió la mano, por lo tanto, a una alianza con los equipos de Carmen Moriyón y Sara Álvarez Rouco, aunque ni él ni su presidente local, Pablo González, se atrevieron a lanzar las primeras peticiones a los foristas para un posible pacto. "Estamos en un momento preliminar y habrá que ver qué piensan los demás, pero la mayoría del centro-derecha es clarísima", apuntó este último.

Junto a Pumariega, salieron elegidos los ahora ediles Jorge Pañeda, Rodrigo Pintueles, Ángeles Fernández-Ahúja y Guzmán Pendás. Pero solo la candidata y el número tres pudieron seguir desde el principio el escrutinio en la sede. El resto se habían ofrecido como interventores en colegios electorales de la ciudad y algunos no lograron llegar hasta el local popular en Álvarez Garaya hasta bien pasadas las once de la noche.

El recuento, por lo tanto, se vivió con discreción, con los medios aguardando en la sala de prensa y los populares siguiendo el resultado en una habitación separada. Y la primera media hora del escrutinio ya dejó entre ver que el crecimiento de Foro les iba a frenar el ascenso a los populares, que se quedaron con 23.294 votos. La propia Pumariega lo aclaró luego. "No vamos a hacer una lectura triunfalista, porque nosotros hemos insistido toda esta campaña en la importancia de que este cambio lo liderase el PP. Defendíamos que éramos la única fuerza que podía garantizar un cambio a mejor con nuestras recetas para salir de la crisis", recordó la popular, que en la misma jornada de ayer, por la mañana y justo después de votar en el Antiguo Instituto, insistió en que seguían confiando en ser la lista más votada. "Finalmente no hemos conseguido liderar ese cambio, pero sí seremos decisivos para que haya un cambio la ciudad", declaró. A Pumariega las cuentas le salen: "Es el mejor resultado de la derecha: quince concejales". De ahí que apelase a la "responsabilidad" –sin citarles expresamente– de Foro y Vox para ponerse de acuerdo. Antes de que terminase el recuento, Pintueles también reconoció a los medios que a su partido le hacía "especial ilusión" ver la posibilidad de "un vuelco hacia las fuerzas del centro-derecha", un cambio "que hace no tantos años parecía imposible".

En clave de partido, la candidata también celebró que el PP haya incrementado su presencia en el Ayuntamiento con dos concejales más respecto a la anterior corporación. "No fue fruto de la casualidad, sino el resultado de un gran trabajo y el esfuerzo de muchas personas", agradeció. Lanzó un guiño especial a su flamante marido, Alejandro Muscat, con quien se casó a finales de abril. "Tuvimos que cambiar la luna de miel por una campaña de electoral", le dijo, emocionada. Fue esta la única vez que la popular estuvo a punto de llorar. Por lo demás, y aunque algo nerviosa y sirviéndose de un discurso ya redactado, la regatista parecía conforme con unos resultados que ella quiso vincular también al trabajo del grupo municipal y del partido local en estos cuatro años: "Han sido personas muy válidas y muy valientes que nos ayudarán a sentar las bases para que el PP siga creciendo".

El resto de ediles no hicieron comentarios y hasta Pablo González prefirió no quitarle protagonismo a su candidata. "Pero los resultados son los que son", advirtió el presidente local, que interpreta las elecciones "como un mensaje positivo y de cambio".

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