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La figura de la semana Eva Rami Pérez Ilustradora, reconocida con dos oros en los Premios Internacionales del Libro en Hollywood

La niña dibujante que llegó a Hollywood

Tras una década fuera como maestra, esta gijonesa metódica, exigente y positiva decidió cumplir su sueño de montar un estudio de diseño

La niña dibujante que llegó a Hollywood

Cuentan sus familiares que de muy niña Eva Rami Pérez (Gijón, 1978) ya realizaba unos dibujos increíbles. Observaba muy detenidamente y se fijaba en los detalles. Hasta el punto de que lo grababa en su cabeza y lo plasmaba en el papel. No le hacía falta tener delante como modelos a unos tenistas para plasmar sus posturas de juego. Ese don innato para dibujar acabó desarrollándolo hace unos años. Hasta el punto de convertirlo en su modo de vida. Tras casi una década trabajando como profesora en Madrid y Canarias regresó a Gijón, a la casa familiar de la parroquia de Ruedes, donde ha montado su propio estudio de diseño, en el que crea unas preciosas ilustraciones, que le han servido recientemente para conseguir con "Éramos una vez... mi mamá y yo" dos oros en los Premios Internacionales del Libro en Hollywood en dos categorías: "Mejor libro ilustrado educativo para niños" y "Libro más inspirador".

Nacida en el barrio de La Arena, se formó en el colegio Clarín dentro de la primera promoción completa de este centro que cumple 40 años el próximo año, para posteriormente finalizar sus estudios en el IES El Piles. Ahí su motivación pasaba por estudiar Bellas Artes, pero tras aprobar la Selectividad no superó las pruebas de acceso ni en Pontevedra ni Salamanca. Entonces se decantó por estudiar Magisterio en la Universidad de Oviedo. Descubrió entonces su vocación por enseñar, que unida a su inquietud y ganas de seguir formándose, principalmente en la ilustración, le llevaron a afrontar nuevos retos a medida que iba introduciéndose en los libros digitales interactivos.

"De mayor quiero ser feliz" fue el primero de muchos cuentos que Eva Rami ilustró. El punto de inflexión le llegó cuando un reajuste de personal en el colegio en el que trabajaba le hizo arriesgarse y dar el paso de estudiar el máster de Diseño Gráfico y retornar a Gijón para montar su estudio, con el que es feliz a día de hoy, con numerosos proyectos en marcha. Porque Rami se encarga no solo de la ilustración, sino también de la maquetación, diseño y coordinación editorial de los libros. Y todo ese aprendizaje también lo comparte con formaciones a profesores para que ellos también puedan crear sus propios cuentos didácticas.

De carácter inquieto, Rami piensa que nunca hay que dejar de formarse. Se sacó un máster en Logopedia y tiene también el título de intérprete de lengua de signos. Incluso estudió árabe dos años.

De madre periodista y padre arquitecto –su hermano siguió también los pases de su padre–, la vena creativa la tenía en los genes. Incluso a su madre también le gustaba pintar en los ratos libres. Quienes la conocen destacan tres rasgos de su forma de ser: "Es muy metódica, organizada y muy exigente con su trabajo, le echa las horas que se necesite, es una currante incansable". Muy observadora, otra de sus cualidades, también destaca por ser una persona sensible, "algo cabezota", de las que se empeña en conseguir todo lo que se propone. No pasa desapercibida cuando se le conoce su actitud positiva, siempre con una sonrisa, aunque sea en los momentos malos.

Su refugio son los dibujos. Pero también la naturaleza. En Gijón tiene ese equilibrio de vivir con el mar y la montaña a un paso, que le permite disuadirse junto a sus dos perras, de raza golden retriever, que se llaman "Llum" y "Mei". También la alimentación, una parcela que cuida mucho, aparece como una de sus distracciones, junto a coger la furgoneta y viajar para desconectar, algo que hizo en el último año, con un viaje a Croacia que le hizo cargar pilas.

En la parte más técnica, Eva Rami practica la ilustración digital, con una tableta. Aunque le gusta la acuarela ella misma reconoce que le falta paciencia para procesos largos de secado de pintura.

El pasado mes de octubre Eva Rami vivió todo un sueño con su doble reconocimiento en los Premios Internacionales del Libro en Hollywood. Pero en el fondo de su corazón le sigue pesando todavía mucho aquel premio del Certamen de Pintura de Noreña que ganó con 7 años. De Noreña a Hollywood, para cerrar un círculo de una pasión por dibujar en torno a la que gira la vida de esta gijonesa, que en su tiempo libre se va inevitablemente hacia la tablet para plasmar todas esas ideas que observa, se instauran en su cabeza y fluyen hacia sus diseños con sello propio.

Eva Rami Mortiner

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