La Escalerona desvela hoy todos sus secretos
La Alcaldesa inaugura, a las 18.30 horas, la exposición impulsada por LA NUEVA ESPAÑA en la Antigua Escuela de Comercio

Vista de la exposición sobre la Escalerona, en la primera planta de la antigua Escuela de Comercio. / Juan Plaza
El Gijón de los Balnearios, la época previa a su existencia, su construcción, sus primeros años, su remodelación y su conversión en uno de los mayores símbolos de toda la ciudad. Todo eso y mucho más repasa la exposición «Guardianes del Tiempo», una muestra impulsada por LA NUEVA ESPAÑA, para conmemorar los noventa años de la Escalerona. La exposición se inaugura hoy, a las 18.30 horas, en la antigua Escuela de Comercio. Lo hará por todo lo alto con la visita de la alcaldesa, Carmen Moriyón, y con una charla para hablar de los peldaños más famosos de todo el concejo. En la misma, además de la alcaldesa, estarán Luis Miguel Piñera, cronista oficial de Gijón; el historiador Héctor Blanco, y Ana Díaz-Negrete, nieta José Avelino Díaz y Fernández-Omaña, el arquitecto de la obra, e hija de Miguel Díaz Negrete, el que la rehabilitó.
La exposición, que recopila decenas y decenas de fotografías, podrá ser visitada de forma gratuita por todos los gijoneses desde hoy. Está abierta hasta el 5 de enero, en horario de 9.00 a 20.30 horas, todos los días salvo los festivos. La entrada es completamente libre para ver una muestra dividida en seis bloques. El primero de ellos repasa el Gijón de los Balnearios, es decir, la ciudad que era a finales del siglo XIX, cuando este tipo de instalación florecieron en la playa de San Lorenzo entre el espacio que queda entre el Real Club de Regatas y la actual escalera cinco. Hubo seis de estos balnearios y los dos que más lejos llegaron en el tiempo fueron el de La Favorita y el de Las Carolinas. El primero estaba donde los Jardines del Náutico y el segundo en la escalera tres, precisamente donde hoy está la Escalerona. Fueron pasto de las llamas en 1936.
El segundo bloque habla de cómo era la ciudad justo en los años previos a la construcción de la Escalerona. En esta parte, podrán verse imágenes de cómo era el paseo del Muro de entonces, sin la actual barandilla, y con notables problemas para acceder al arenal en los días de calor y sol del verano. Esto era así porque de aquella, en el lugar donde estaba la Escalerona, había una doble rampa que no era capaz de absorber todo el trasiego de la ciudad en el estío. Esta doble rampa, hay que recordarlo, era el único acceso que había a la playa desde la Pescadería hasta la escalera cinco. Hubo un primer proyecto para solucionar este problema, encargado al técnico municipal Miguel García de la Cruz, pero que nunca llegó a salir adelante.

Entrada a la antigua Escuela de Comercio, ayer. / Juan Plaza
El tercer bloque se refiere a la construcción de la Escalerona. La obra fue inaugurada el 15 de julio de 1933, en los tiempos de la Segunda República. Había sido el crac del 29 hacía cuatro años y el mundo se había sumido en una crisis económica que no solo ponían el punto y final a los conocidos como los «felices años veinte», sino que abocaría al mundo a un nuevo conflicto mundial que tuvo, precisamente, como escenario de pruebas España. Gil Fernández Barcia era el alcalde en 1933 y fue el que trató de impulsar una serie de obras públicas en la ciudad para lograr generar recursos económicos. Fruto de este plan se alumbró la construcción de la Escalera Monumental de San Lorenzo, que buscaba abrir el centro urbano a la playa y viceversa. Se le encargó al arquitecto José Avelino Díaz y Fernández-Omaña y las obras se encargaron a Casa Gargallo. Duraron poco menos de un mes.
El cuarto bloque se centra en los primeros años de La Escalerona y de su enorme utilidad para los gijoneses de la época. Con la bandera de Gijón luciendo en lo más alto, la obra contaba con termómetro, reloj y llegó a dar la información de las mareas. Dato, este último, fundamental sobre todo en los meses de verano en unos tiempos en los que la información de servicio no estaba tan mano como ahora. El paso del tiempo convirtió a la infraestructura en todo un símbolo, pero también hizo mella en él.
De ello se habla en el quinto bloque, con la reforma que le fue encargada en tiempos de Paz Fernández Felgueroso como alcaldesa al arquitecto Miguel Díaz Negrete. Este puso todo su empeño en que se usaran, en la medida de lo posible, los mismos materiales que había empleado su padre varias décadas antes. La obra terminó otro 15 de julio, pero de 2022 y así ha seguido hasta nuestros días, en los que, como se cuentan en el último bloque de la muestra, se ha ganado un hueco en el imaginario colectivo de toda la ciudad. Ha aparecido en carteles de todo tipo y sido escenario de cantidad de eventos a lo largo del tiempo. Ofrece una ubicación privilegiada para seguir dos de las grandes citas del verano gijonés: el Festival Aéreo y la Noche de los Fuegos. Pero también es un mirador excepcional a toda la bahía de San Lorenzo, un lienzo prácticamente sagrado de este a oeste para los gijoneses.
- Lo nunca visto en una tienda de Gijón: echa su currículum y pide que no la llamen para trabajar, 'solo para sellarlo
- Evacuado al HUCA y en estado muy grave tras caer probando una moto en Gijón
- Fuera moros', la pintada en un colegio de la zona sur de Gijón que indigna a la comunidad educativa
- Alarma en Gijón: explota la batería de una silla de ruedas eléctrica de un hombre de 88 años
- El Circo del Sol estrena su nuevo espectáculo en Gijón: así es el curioso trabajo de los 120 artistas que giran por todo el mundo
- Luis Rodríguez Garat asume la Comandancia Naval con su jura 'al Rey y la Constitución
- El nuevo espectáculo del Circo del Sol desata la locura en Gijón el día de su estreno: una ovación de más de 2.000 almas
- Mudanza de la Policía Local de Gijón: la nueva comisaría iniciará en días el traslado de los agentes