Aplausos, abrazos y confeti: así fue el recibimiento a la Banda de Gaitas "Villa de Xixón" tras triunfar en Nueva York
"Buscábamos poner a Asturias en la Gran Manzana", reivindican los miembros de la formación, nombrada mejor banda extranjera del desfile de San Patricio

Sergio García / Amor Domínguez FOTO: Marcos León
Con aplausos, vítores, una bandera asturiana y hasta confeti. Así recibieron esta mañana los familiares de los integrantes de la Banda de Gaitas "Villa de Xixón" a la formación, recién llegada de Nueva York tras alzarse con el premio a la mejor banda extranjera en el desfile de San Patricio, que transcurría por la Quinta Avenida. "Era lo que buscábamos, poner a Asturias en la Gran Manzana", comentaba José Luis García, director de la agrupación.
Hacia las diez de la mañana, las chaquetas rojas (y las maletas) empezaron a asomar por el autobús frente a la escuela donde ensaya la banda, en la calle Severo Ochoa, en Pumarín. Allí, un grupo de familiares aguardaba la aparición de los héroes gijoneses. Con nervios estaba Miguel García, padre de Paula y Celia, de 19 y 15 años, respectivamente, y componentes del grupo. "Estamos con una ilusión que es normal, nos compartieron que la experiencia fue brutal", indicó García, que mostró su "orgullo" de padre y reivindicó el esfuerzo que conllevó toda la preparación para la gran cita. "Fueron muchas horas y ensayos, muchos pasacalles y fiestas con su música", subrayó. Gaita en mano, Paula García puso la primera nota musical nada más bajar del bus, despertando la ovación de los presentes.

La Banda de Gaitas "Villa de Xixón", recibida con honores tras triunfar en Nueva York (en imágenes) / Marcos León
"Estamos muy contentos, nos gratifica que tanto trabajo se vea recompensado", señaló José Luis García, que encomió el "compañerismo" de la expedición, de 75 personas. En el desfile tomaron parte 48 músicos y seis abanderados. Sonaron canciones como "El otro Finisterre" o "El Pichón". "Otras bandas, como escocesas o irlandesas, tenían el mismo patrón, y nosotros jugamos con el ritmo ternario y modos menores", explicó el director de la formación gijonesa, que afirmó que la organización destacó la "alegría" de las piezas interpretadas. Una alegría que bien mereció un reconocimiento que coronó el viaje.
No faltaron anécdotas en el recorrido. "Estaba previsto salir con la bandera de España, pero con el caos de tráfico al cortar la Quinta Avenida se quedó en una furgoneta que nos traía", aseguró José Luis García, que difícilmente olvidará el momento en Times Square, en el corazón de Manhattan, donde la banda tocó el himno de Asturias. "En segundos se juntaron allí muchísimas personas y aunque tocamos más piezas después fue el himno el que trascendió", ensalzó.
Los hermanos Olaya y Enol Monteserín, de 16 y 11 años, estaban eufóricos. "Lo pasamos muy bien, fue una experiencia muy guay desfilar en Nueva York", confesó la primera, que recuerda con especial cariño la interpretación del "Asturias, Patria Querida". "Fue muy emocionante", sostuvo la joven, contenta a más no poder por el premio a la mejor banda extranjera. "Había muchas que eran impresionantes y ganarlo mola un montón", decía Monteserín. A Enol, el desfile por la Quinta Avenida podría haber durado más. Y eso que la participación de la agrupación se prolongó durante dos horas. "Se me hizo corto", bromeaba.
"Fue una pasada", declaraba Fernando Eijo, también miembro de la Banda de Gaitas "Villa de Xixón". A su lado, Azucena Díaz evocaba la estancia estadounidense y, sobre todo, el desfile de San Patricio. "Pasamos muchos nervios", admitía Díaz, para la que la participación de la agrupación ha servido para reivindicar instrumentos como la gaita o la pandereta. "Queremos que tomen relevancia", manifestó Azucena Díaz, abrumada por el recibimiento en Gijón y por la cobertura del periplo norteamericano. "Estábamos impresionados por la repercusión", incidió.
A Silvia Suárez, de 9 años, jamás se le borrará este viaje. Y a sus padres, Luis Suárez y Sonia Fernández, que la arroparon en Nueva York, tampoco. "Fue una sensación estupenda, una experiencia maravillosa y única y para ella, lo más de lo más", afirmaba Fernández, mirando a su hija, desde pequeña prendada por la música tradicional. "Le gustaba desde recién nacida la gaita, le llamaba la atención", confirmaba Luis Suárez.
La última presencia de la Banda de Gaitas "Villa de Xixón" en el desfile de San Patricio en Nueva York databa de 2014. Ahora, en 2025 (año en el que la formación cumple 25 primaveras), la comitiva regresó de tierras americanas doblemente satisfecha y con un galardón bajo el brazo. "Es el mejor regalo que podíamos tener", decía hace unos días el director, José Luis García. Hoy la banda recibió otro premio, el cariño de los suyos.