Alarma en pleno centro de Gijón por un fallo en la caldera de un edificio

Susto en pleno centro de Gijón. Un amplio operativo de bomberos y agentes de la Policía Local se movilizaron esta tarde hasta la calle Cabrales alertados por un posible fallo en la caldera un edificio, el número 31, ubicado poco antes de la confluencia con la calle Casimiro Velasco, y que desprendía un fuerte olor que alertó a sus residentes.

El operativo, desplegado poco antes de las cinco de la tarde, obligó a detener el tráfico rodado en la zona mientras los integrantes del servicio de Prevención, Extinción de Incendios y Salvamentos de Gijón. El incidente quedó en un susto y el incidente no consta que haya provocado daños.

Según explican desde el Ayuntamiento, el problema apunta a que se registró en una caldera y que, a pesar de que sí se apreció "mucho humo negro", los bomberos no hallaron el origen del fuego, por lo que no hubo labores de extinción como tal. Sí que hubo trabajos, muy estrictos, para ventilar el edificio, donde se detectaron niveles preocupantes de concentración de monóxido de carbono, lo que hizo que la intervención durase buena parte de la tarde.