Ya hay fecha para el traslado a la nueva Jefatura de la Policía Local de Gijón: esta es la previsión

Tras un proceso de licitación por lotes más complejo de lo previsto, el inicio del traslado de personal y enseres a la nueva Jefatura de la Policía Local comenzará el mes que viene. Supervisado por la concejalía de Seguridad Ciudadana y Emergencias, el operativo del gobierno local pretende ser "progresivo", por etapas, priorizando en estas primeras semanas de trabajo el traslado de las unidades operativas –agentes y vehículos– y dejando para el final la complicada puesta en marcha del nuevo centro de control, que es el cerebro de cualquier instalación de este tipo. Comienza así la última fase para el estreno de una Jefatura que ha lidiado con todo tipo de percances, incluyendo una paralización temporal de los trabajos de construcción, y sumado, ya en estos últimos meses, a una complicada adjudicación de los contratos para la compra e instalación de mobiliario. Hasta que esta nueva Jefatura no funcione a pleno rendimiento, por lo demás, los agentes del servicio de atención ciudadana seguirán trabajando con normalidad en su hasta ahora sede de San José.

El traslado de agentes y vehículos no se espera que genere ningún trastorno logístico, por lo que la idea este que estas primeras semanas de "mudanza" sean más bien tranquilas. Para entonces, se espera, quedarán rematadas las licitaciones pendientes de formalizar como la más reciente, relacionada con la galería de tiro, que sigue por ahora en estudio por parte de la mesa de contratación. Este contrato es buen ejemplo de por qué el traslado no ha podido realizarse hasta ahora. La instalación de esta galería, licitada en un contrato valorado en 87.000 euros, tuvo que repetirse tras un primer intento realizado el año pasado y que se saldó desierto después de que la única empresa que había presentado oferta la retirase pocas semanas después de formalizarla.

Respecto al centro de control, está siendo otra licitación complicada que parece que empieza ahora a agilizarse. Tras la publicación del concurso a finales del año pasado, se suspendió el procedimiento pocas semanas después por unos errores de forma que se corrigieron y, más recientemente, se suspendió por segunda vez después de que una de las empresas interesadas en el contrato presentarse un recurso especial que, tras la última reunión de la mesa de contratación este martes, ha quedado denegada, lo que permite reactivar el proceso de revisión de ofertas. El contrato está valorado en 1,3 millones y permitirá a la nueva Jefatura establecer un control integral de incidencias mucho más exhaustivo y en coordinación con otras autoridades.

La concejalía de Seguridad Ciudadana, liderada por la forista Nuria Bravo, estima que, para evitar que la activación de este nuevo centro de control pueda generar algún tipo de interferencia en la gestión de avisos, es probable que durante un tiempo puedan funcionar ambos (el nuevo y el de la Jefatura vieja) para mayor seguridad.

Por lo demás, lo que empieza el mes que viene es la última fase de un proyecto que ha dado más de un quebradero de cabeza a las autoridades. Queda lejos el concurso de ideas de 2017 y la primera adjudicación de los trabajos a Acciona en 2019. Iniciada la construcción en el año de pandemia, en 2021, en el anterior mandato, se aprobó una primera ampliación de plazos que se volvió a poner sobre la mesa al año siguiente, ya entonces con la estimación del anterior gobierno local de modificar el plan. A inicios de 2023, con la obra suspendida temporalmente, se barajó un cambio en el plan de usos para, entre otras ideas, incluir en el edificio algún otro servicio municipal ajeno al uso policial, una propuesta que los foristas, por entonces en la oposición, consideraban peligroso. Con el nuevo gobierno local, se blindó el uso policial del edificio y se relanzó la obra, que finalmente superó los diez millones de euros. Más recientemente se acometió otra actuación clave, relacionada con el sistema de seguridad del edificio, y se puso en servicio la zona ajardinada.

Labores de limpieza y fumigación antes de la apertura del edificio

En el marco de la puesta en marcha de la nueva Comisaría de la Policía Local, y toda vez que las tareas de traslado de la sede actual a la nueva están a pocas semanas de iniciarse, el Ayuntamiento ha encargado también recientemente un servicio de limpieza del entorno que ha tenido que reforzarse con tareas de fumigación. Según se comentó ayer en comisión, a pregunta del PSOE y con respuesta del edil popular Rodrigo Pintueles, se tuvo que actuar, en concreto, contra la proliferación de la cochinilla de la humedad, también conocida como bicho bola. El concejal popular señaló que, aunque desde el Servicio de Calidad y Vigilancia Ambiental se ha visitado el recinto esta misma semana para estudiar esta cuestión y para valorar si era necesario actuar desde esta concejalía, finalmente las labores las realiza en solitario y con medios propios el equipo de su homóloga Nuria Bravo, responsable de Seguridad Ciudadana. El Ayuntamiento, después, señaló mediante nota de prensa que estas tareas de fumigación forman parte del "procedimiento habitual" para casos como este, en los que se ve afectado un edificio "que ha estado en obras durante los últimos años". Descargó el Ayuntamiento la existencia de cualquier plaga de insectos en el entorno de la Comisaría "ni en ningún edificio municipal". La cochinilla de la humedad suele preferir espacios oscuros y húmedos –como los pececillos de plata, que son un tipo de insectos más comunes en el ámbito doméstico– y se la conoce popularmente como "bicho bola" por tener la capacidad de enrollarse sobre sí mismas cuando se sienten amenazadas. Estos animales son inocuos y no pican ni contagian enfermedades a los humanos, si bien su presencia puede ser resultar molesta, y en el caso de la Comisaría se precisaba depurar cualquier presencia de este tipo de insectos para poder acometer con la instalación de mobiliario y traslado de enseres.

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