El colegio La Milagrosa de Gijón cumple 60 años "educando en valores"

El colegio La Milagrosa de Gijón celebró ayer su 60º aniversario con varios actos que comenzaron por la mañana con una eucaristía en la parroquia de San Vicente de Paúl en la que participó el coro de alumnos. "Mantenemos el legado que nos dejaron las Hijas de la Caridad. Valores de respeto y humildad que vemos que en la sociedad van en declive y que intentamos potenciar y seguir con lo que nos enseñaron, educando en valores", resumió Marcial Orrego, director del centro.

La liturgia corrió a cargo del sacerdote Manuel Viego, que recalcó la importancia de la labor de las Hijas de la Caridad, recordando también los 120 años de la Cocina Económica. "Esto era un fumeru. Un prau en el que jugábamos al fútbol de pequeños. En este ambiente vinieron a poner un colegio porque vieron que había una necesidad. Aunque ahora ya no estén en el centro, seguimos necesitando de su oración y trabajo mientras siguen ayudando donde más falta hace", explicó el párroco durante la homilía.

La alcaldesa, Carmen Moriyón, también estuvo presente en la misa y dejó unas palabras a los asistentes. "Recordaba el párroco que cuando las Hijas de la Caridad fundaron el colegio, ya llevaban sesenta años sirviendo a Gijón, ayudando a las personas que más lo necesitaban". Recordó los primeros pasos del centro, cuando en la zona "todavía existía el chabolismo" y agradeció "el trabajo y servicio" de la congregación.

La eucaristía culminó con la entrega por parte del Ayuntamiento al colegio de una medalla conmemorativa de Jovellanos. La jornada festiva continuó en el centro con diferentes actividades para los alumnos y un encuentro entre antiguos alumnos, profesores y directores de otros colegios de Gijón. ◼