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Nuevo giro en el caso del carbón desaparecido en el Puerto de Gijón: Ebhisa renuncia ahora a un informe pericial contra la demanda (y este es el motivo)

La pericial descartada en el caso sostiene que la obligación de custodia era de otra firma

El Puerto mantiene otro estudio que avala que no hubo perjuicio económico

Vista aérea del puerto.  | LNE

Vista aérea del puerto. | LNE

Gijón

La terminal de minerales de El Musel, Ebhisa, controlada por la Autoridad Portuaria de Gijón, está variando su estrategia de defensa ante la demanda interpuesta por la empresa Telf en la que le reclama 52,79 millones de euros por la desaparición de 123.000 toneladas de carbón de las instalaciones de Ebhisa. Además de haber renunciado a que declaren como testigos el exdirector del Puerto y la exdirectora de Ebhisa, tras haberles abierto un expediente disciplinario para su despido, la sociedad pública también ha comunicado al Juzgado de Primera Instancia número 10 de Gijón que renuncia a uno de los dos informes periciales que encargó para defenderse de la demanda.

La vista del juicio está fijada en dos sesiones que tendrán lugar el lunes y el miércoles de la semana que viene. Pero mientras el asunto sigue su curso en sede judicial, el Puerto y Telf ya han mantenido contactos con vistas a intentar alcanzar un acuerdo extrajudicial para zanjar el asunto, tal como informó ayer LA NUEVA ESPAÑA.

El origen de esta disputa está en la descarga en Ebhisa en octubre 2020 de 159.984 toneladas de carbón adquirido por NMR al intermediario Telf. NMR sólo pagó un 30% del precio pactado por un cargamento valorado entonces en 7,5 millones de euros. Supuestamente ese carbón, procedente de Kazajistán, habría sido trasladado poco después de su descarga por NMR al Muelle Norte y cargado para intentar venderlo en Marruecos. Telf tardó años en conseguir primero que la Corte de Arbitraje de Londres le reconociera como propietario del cargamento y después en convalidar ese laudo arbitral en los tribunales españoles y reclamar que el administrador concursal de NRM –que acabó quebrando supuestamente de forma fraudulenta con un pasivo de 170 millones de euros– reconociera que ese carbón no era un activo de NMR sino propiedad de Telf.

Una reclamación de 52,79 millones de euros

En la demanda civil de Telf contra Ebhisa ambas partes han presentado informes periciales. El que ahora ha retirado la empresa pública fue elaborado este año pro Geosyntec Consultants. Se trata de un informe pericial técnico sobre la desaparición del carbón, la responsabilidad de su custodia y mediciones del carbón que quedó en Ebhisa y pudo recuperar Telf (mediciones que quedaron desfasadas tras el pesaje del mineral el pasado mes de febrero, cuando Telf retiró en camiones las 36.698,70 toneladas que permanecían en Ebhisa).

En las conclusiones del informe pericial ahora descartado por la empresa pública el perito indica que "dentro de las actividades de Ebhisa, no se incluye la vigilancia, ni la custodia, ni el aseguramiento de las mercancías almacenadas en su terminal, así como tampoco forma parte de la actividad de Ebhisa cargar buques con destino a otros puertos". El informe, además, apunta que en noviembre de 2020 el carbón se trasladó desde las instalaciones de Ebhisa hasta terreno colindante en el que entonces operaba NMR, sin que haya registros de salida de ese carbón de Ebhisa.

El perito también señala que Telf había contratado a un consignatario de El Musel "para controlar y custodiar el carbón del ‘Berge Triglav’", servicio que "no prestó".

La pericial de Geosyntec también resume los dos informes de 2024 y 2025 tras la investigación interna efectuada por el exdirector de la Autoridad Portuaria de Gijón, José Manuel del Arco, sobre la desaparición del carbón. Una investigación que concluyó que NMR habría supuestamente distraído carbón de aquel cargamento durante las operaciones de cribado, para, previa mezcla con otros carbones, trasladarlo sin informar a Ebhisa a la ampliación de El Musel, encargando su estiba en varios buques a dos compañías estibadoras de El Musel.

Más allá de la civil en los Juzgados

El informe pericial que mantiene Ebhisa trata de rebatir el supuesto perjuicio económico que Telf dice que se le ha causado. Así, en ese informe pericial se concluye que Telf no ha sufrido ningún perjuicio económico, sino que ha obtenido beneficios tras haber recuperado el carbón que permanecía en Ebhisa.

El argumento es que Telf ha omitido en su reclamación que NMR le pagó 1,88 millones de euros, que la compañía aseguradora de la empresa consignataria a la que contrató la custodia del mineral le habría abonado otros 3 millones de euros y que el valor de las menos de 40.000 toneladas que pudo recuperar en El Musel se acercaba a los 5 millones de euros. Este informe pericial concluye que Telf obtuvo finalmente un beneficio de más de dos millones de euros por el cargamento contratado por NMR. Ebhisa ha presentado ahora un anexo a este informe.

La vía civil no es la única judicial que ha promovido Telf. También está pendiente de resolver un recurso en un juzgado de instrucción de Gijón sobre la inhibición de otro de Madrid respecto a la denuncia penal por la que declararon como investigados tres cargos del Puerto y Ebhisa y tres de la empresa consignataria que actuó como agente de Telf en El Musel.

Los nuevos gestores del Puerto también están promoviendo una investigación interna sobre lo acontecido. A raíz de un informe encargado a KPMG, el Consejo de Administración de Ebhisa, en base a un informe al respecto de Abogacía del Estado, acordó trasladar el resultado de esa investigación a la fiscalía y abrir expediente disciplinario para despedir al exdirector de El Musel, José Manuel del Arco y a la exdirectora de Ebhisa. El Puerto está continuando ahora con esa investigación en la propia Autoridad Portuaria. Entre otros asuntos, los gestores de Ebhisa interpretan un correo electrónico del expresidente de El Musel, Laureano Lourido, como supuestas indicaciones a Del Arco y otros cargos de Ebhisa para ocultar la desaparición del carbón, interpretación de la que discrepan otras fuentes.

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