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El escudo de armas de Jovellanos

Vicisitudes en torno a los apellidos del prócer gijonés desde la fundación del mayorazgo familiar en 1584 hasta la polémica sobre el emblema de la cabecera de su cama

Sabido es que el mayorazgo de los Jovellanos fue fundado por escritura que otorgaron en Gijón, el 17 de abril de 1584, el matrimonio Gregorio García de Jove y María González de Bandujo, en la persona de su hijo Juan García de Jove. Entre las cláusulas figura la de "quel que fuere tenedor del, se llame del apellido de Jove, y pinte las armas de nuestros linajes, que por parte de mí, el dicho Gregorio de Jove, son las armas de la Vega y las de Lavandera, y por parte de mí, la dicha María González de Bandujo, las armas de Bandujo y las del Bustio, so pena que, si así no lo hiciere que por el mismo caso, el dicho mayorazgo, pase al siguiente en grado, que cumpla esta condición".

Así pues, quitando las armas de García y González, apellidos corrientes, los sucesores en el vínculo deberían poner en su escudo de armas, al menos, las de los apellidos Vega, Labandera, Bandujo y Bustio. Se dice Vega, porque son las mismas que las de Jove. La historia es algo así: en la guerra de Granada, uno de los moros arrancó un cartel que ponía AVE MARÍA y atándola a la cola de su caballo desafió a los soldados cristianos; uno de ellos, llamado Garcilaso de la Vega lo persiguió y le quitó el cartel convirtiéndolo en sus Armas. Los Jove decían descender de este Garcilaso de la Vega; por cierto, que siempre me ha llamado la atención que hubiera en Gijón una calle dedicada a Garcilaso de la Vega, y considerando lo que va dicho, más me inclino a pensar que pudiera estar dedicada al héroe de Granada antes que al poeta de Toledo. Pero, además, también entre los papeles familiares de los Jovellanos se encontraba uno en el que se decía haber desafiado y vencido un Jove a un Mendoza, cuyo escudo es también el AVE MARÍA, y por eso tomaron el derecho a usarlo.

En 1659 una descendiente de los Jove-Bandujo, Lucía Jove Estrada, casó con Francisco Llanos Jove. Entra así el apellido Llanos en la familia y se unirá al Jove. Es su hijo, también llamado Francisco, el que cambia los apellidos y se hace llamar Jove Llanos. Como veremos, las armas de Llanos parece que fueron antes las de Lavandera y por eso, en nuestra opinión, en el escudo de la torre de la casa natal de Jovellanos aparece un escudo que lleva repetidas las armas de Labandera, por el fundador y por los Llanos.

En el informe presentado en las pruebas de nobleza de Jovellanos para el ingreso en la orden de Alcántara, aparecen descritas las armas de sus apellidos de la siguiente manera:

1) Armas del apellido Jove Llanos: Por una parte, las de Jove "en jefe con tres bandas verdes y tres rojas perfiladas de oro en campo de este metal y divididas en dos trozos encontrados sobre una línea, que parte el cuartel diagonalmente, en cuyos dos claros se registran Ave maría"; por otra parte, las de Llanos, que "antes parece fueron de La Banda?, traen sobre plata un brazo armado con Bandera roja en la mano, en ella una cruz dorada de cuatro ángulos iguales, una flor de Lis dorada en la cima de el asta, una llave al frente y tres bustos con turbante debajo del codo".

2) Las armas de Carreño, pertenecientes a la abuela materna de Jovino se describen: "trae sobre plata una águila de sable que afirma cada garra sobre una rueda de carro con orla dorada y en ella ocho arpas rojas".

3) Las armas de Ramírez, pertenecientes a su madre, hija del marqués de San Esteban: "el principal [cuartel] trae sobre plata dos triángulos azules cuyos ángulos agudos se tocan en el centro del cuartel, y en el de ellos se registra en cada uno una caldera dorada, y en los claros que dejan los triángulos en el escudo, diez culebras o anguilas naturales colocadas con simetría; y todo el cuartel orlado con diez castillos de oro sobre blanco con los intermedios de rojo".

4) Las armas del apellido Miranda de su abuela materna: "en campo rojo cinco bustos de doncellas con las peanas en concha dorada, y lo restante a lo natural, rodeado el escudo de cuatro serpientes aladas y encontradas mirándose cada dos, unas en la parte superior y otras en la inferior".

Tenemos así las armas de Jovellanos. Sin embargo, hay quien sostiene que el escudo de Jovellanos es el que figura en el cabecero de su cama, propiedad hoy de los marqueses de Mohías. Aparece en él las armas de los Bandujo, Bustio y Jove. Lleva además una corona y la cruz de Alcántara. Se argumenta que Jovellanos estaba obligado a poner en sus armas según la escritura de mayorazgo estos apellidos. Pero entonces ¿porqué no aparecen las armas de Labandera que también estaba obligado a poner, conforme a la escritura fundacional del vínculo mayorazgo, y que formaban parte de su apellido con el que siempre firmaba: "Jovellanos"?

Se ha dicho también que adoptó este escudo en 1798, cuando por muerte de su hermano Paula pasó a él el mayorazgo de su casa. En este tiempo, lo que sí hizo fue encargar a Goya un exlibris en el que aparecen cinco apellidos: en el centro, como escusón, el de JoveLlanos (partido en Jove y Lavandera, tal y como se describen en el expediente de prueba de nobleza); en el primer cuartel (partido: Bandujo y Bustio); en el segundo, Ramírez, también partido; en el tercero el águila con las dos ruedas de carro, de Carreño; y en el cuarto cuartel, Miranda con sus bustos y sus culebras. De manera que para nosotros no hay duda de que estas son las armas de Jovellanos que corresponden a sus cuatro apellidos y los de los fundadores del mayorazgo. Cómo no pudo inventárselo Goya, hay que deducir que se lo "dictó" el interesado. Jovellanos gustaba de hacer estos dictados. Dice su amanuense Martínez Marina cuando pintaba la celda del Castillo de Bellver: "Dibujé los costados [de la sobrepuerta], uno y otro según la invención del amo que, aunque no sabe pintar, dicta". No tenemos duda de que estas fueron las armas que quiso tener Jovellanos y las que tuvo.

Entonces, de la cama ¿qué? Juan García de Jove casó dos veces: en primeras nupcias con Aldonza Labandera, de quien descendían los Jovellanos; en segundas nupcias, con Isabel Ramírez de Miranda, de quien descendía el marqués de San Esteban, abuelo materno de Jovellanos, que había profesado en la orden de Alcántara, profesión y título que explican los elementos que completan el escudo: la cruz y la corona que es de cuatro florones, de los que se ven uno y dos mitades, y va cargada de perlas tres a tres en los intermedios, es decir, que es corona de marqués, y Jovellanos no fue marqués. También podría explicarse la ausencia de las armas de Labandera, por el hecho de que el marqués no descendía de Aldonza Labandera y ambas ramas familiares estaban muy enfrentadas por causa de los pretendidos derechos de honores y sepulturas en la iglesia de San Pedro. ¿Conclusión? Como dice el profesor González Santos, la cama fue aportada al matrimonio por la madre de Jovellanos, y muy probablemente -añadimos nosotros- naciera en ella.

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