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Paco G. Redondo

Participación

Entre Halloween, el PSOE de Gijón y el PP de Asturias

Todos los santos cristianos y/o los difuntos en general: se trata de participar y celebrar hacia el 1 de noviembre a los seres queridos fallecidos. Así pues los eventos emotivos católicos del sur de Europa y Latinoamérica, y las fiestas de los muertos de Halloween con los niños sobre todo disfrutando con sus disfraces no son contradictorias sino complementarias, tengan más o menos lejanas raíces en cultos celtas primitivos. Según mi tesis histórica explicativa: Amenofis IV, Akenatón y Moisés eran la misma persona, por tanto religión egipcio–judeo–cristiana. Frente a lucha de clases, guerra civil e incautación violenta de lo ajeno, exaltación del pacifismo, fraternidad y solidaridad.

Esto de los izquierdistas de Gijón para implantar el laicismo militante e incluso que no pueda haber manifestaciones o símbolos cristianos públicos, sí que choca con celebraciones religiosas y tradiciones culturales populares. Además de la Cabalgata de Reyes: ¿los cementerios son lugares públicos? Llegando al final del sofisma: ¿deberían prohibirse las cruces en los cementerios? ¿No podría ir alcalde ni concejal alguno en representación cívica a un funeral cristiano como el de Quini? En la Segunda República idolatrada, la Constitución de 1931 prohibía al clero el ejercicio de la enseñanza, la industria y el comercio, les faltó añadir la agricultura para abolirlo de hecho. Curiosa forma de entender la democracia y las libertades, con lo bonito que es que cada quien crea o deje de creer lo que quiera sin meterse con nadie, ni quemar templos ajenos.

Del proceso para elegir candidato regional del PP de Asturias a la presidencia autonómica para las próximas elecciones de mayo del 23, llama la atención lo nombre el divino dedo de Feijoo y/o su equipo. La Constitución española de 1978 vigente dice que los partidos encauzan la representación y deben ser democráticos. En el PSOE de Gijón hemos visto al querer la militancia participar para elegir, el señor Adrián Barbón lo ha calificado de barullo, y mientras recogían firmas para poder votar pidió mediante los medios de comunicación públicos que acabara el barullo ya. Lo lógico sería el PP de Asturias celebrase un congreso regional, y los militantes eligieran a su directiva y a sus candidatos. ¿O los militantes solo están para adular, aplaudir y repetir consignas? ¿Qué van a reivindicar después? Luego se extrañarán que haya autoritarismo y corrupción.

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