Washington

El estratega de la campaña electoral de la candidata demócrata Hillary Clinton, Mark Penn, ha renunciado a su puesto tras la polémica abierta por los contactos que mantuvo con el Gobierno colombiano sobre las posibilidades de favorecer el Tratado de Libre Comercio (TLC) con EE UU, al que Clinton se opone.

Una reunión mantenida el lunes pasado con la embajadora colombiana es la que le ha costado la cabeza a Penn. La razón es que éste es, a la vez, estratega de Clinton y presidente de Burson-Marsteller Worldwide, empresa contratada por el Gobierno de Colombia en marzo del año pasado para que le ayude en la negociación del Tratado de Libre Comercio (TLC) ante el Congreso estadounidense.

El TLC con Colombia, cuyo anteproyecto envió ayer mismo el presidente Bush al Congreso, en un desafío a los demócratas, que controlan el legislativo, se ha convertido en un elemento central de captación de votos en las elecciones primarias del partido del asno.

Tanto Clinton como su rival, el senador por Illinois Barack Obama, cortejan a la clase trabajadora, que teme pérdidas de puestos de trabajo si se aprueba el Tratado, al que, en consecuencia, también se opone Obama. Aunque éste encabeza las primarias, lo hace por un estrecho margen, por lo que cada delegado obtenido en cada Estado es ahora de la máxima importancia.

Por otra parte, Clinton emplazó ayer al presidente Bush a no asistir a la ceremonia de inauguración de los Juegos Olímpicos de Pekín a menos que China muestre mejoras en materia de Derechos Humanos.