Pekín / Londres

El portavoz del Ministerio de Exteriores chino, Qin Gang, ignoró ayer el ofrecimiento hecho el miércoles en Londres por el Dalai Lama, líder espiritual de los tibetanos, de acudir a los Juegos Olímpicos si es invitado y si las conversaciones con el Gobierno chino son constructivas.

«Hemos oído los comentarios pertinentes de la parte del Dalai Lama, pero si la parte del Dalai Lama quiere de verdad contribuir a su madre patria debería abandonar sus actividades separatistas, dejar de organizar y provocar actividades violentas y dejar de interrumpir los JJ OO», dijo Qin.

Los disturbios de marzo en Lhasa, la capital tibetana, que se cobraron la vida de 19 personas, según las autoridades chinas, y de más de 200 en la posterior represión china, según el Gobierno tibetano en el exilio, provocaron una oleada internacional de protestas que llevó a Pekín a acceder a mantener conversaciones con representantes del Dalai Lama.

«En las circunstancias actuales toda China está centrada en las labores de asistencia a las víctimas del terremoto», añadió Qin, para dar a entender que, de momento, las conversaciones con los representantes del Dalai Lama no son en absoluto prioritarias.