El canciller de Honduras, Enrique Ortez, restó importancia hoy a la suspensión de su país de la OEA por no reinstalar al depuesto presidente, Manuel Zelaya, derrocado hace una semana por los militares.

Ortez recordó, en declaraciones a la prensa, que su Gobierno decidió el viernes salirse de la Organización de Estados Americanos (OEA) en ejercicio de su "soberanía" y en "repudio" a la pretensión de ese organismo de que se reinstale a Zelaya.

"La OEA lo único que puede hacer es separarnos y allí queda"; esto "es lo peor que nos puede pasar, seguimos siendo un Estado soberano y todavía somos miembros de las Naciones Unidas", expresó.

Además, enfatizó que "los países pueden tener relaciones bilaterales" y en este sentido "bilateralmente el comercio va a seguir", y recalcó que el secretario general de la OEA, José Miguel Insulza, "no puede suspender el comercio; eso va a seguir".

Recordó que Cuba estuvo suspendida de la OEA desde 1962 hasta este año, "y allí tienen a Fidel Castro (el líder cubano, alejado de la Presidencia por una enfermedad), no le ha pasado nada" por esa separación del Sistema Interamericano.

La Asamblea General de la OEA suspendió hoy a Honduras por no haber cumplido el mandato, en el plazo de 72 horas dado al nuevo Gobierno de Roberto Micheletti, de restablecer el orden democrático, el estado de derecho y restituir a Zelaya en la Presidencia.

Zelaya ha anunciado que regresará hoy al país, aunque el canciller Ortez advirtió de que no se permitirá que aterrice su avión para evitar "que empiece a correr sangre" en Honduras.