El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, anunció hoy que España destinará otros 500 millones de euros para reforzar programas de nutrición infantil en los países menos desarrollados.

Zapatero hizo este anuncio durante su intervención en la reunión sobre seguridad alimentaria que se celebró esta mañana en L'Aquila, en el marco de la tercera y última jornada de la cumbre del G-8 que se está celebrando en esta ciudad del centro de Italia.

El nuevo compromiso adquirido por España se une al de destinar 1.000 millones de euros en los próximos cinco años a proyectos para fomentar la agricultura y la seguridad alimentaria que Zapatero anunció con ocasión de la reunión de alto nivel sobre esta cuestión que se celebró en Madrid el pasado mes de enero.

En esa reunión, los países presentes acordaron fraguar una Alianza Mundial para la Agricultura, la Seguridad Alimentaria y la Nutrición así como movilizar de modo coordinado más recursos financieros adicionales en la lucha contra el hambre para evitar así que la crisis financiera internacional pudiera reducir todavía más las ayudas al desarrollo.

"Hoy, nos podemos sentir satisfechos al comprobar que otros donantes se unen a este llamamiento, anunciando nuevas contribuciones financieras para luchar contra el hambre y la miseria", celebró Zapatero no sin insistir en que "en los próximos meses tenemos que ser muchos más".

"Hoy más que nunca, debemos mantener nuestros compromisos de ayuda al desarrollo, nuestros compromisos con la inversión en la agricultura, con el desarrollo rural, con la seguridad alimentaria", remarcó.

Esta es la razón por la que España ha decidido añadir 500 millones de euros más a los 1.000 millones ya comprometidos, además de mantener el compromiso global de alcanzar el objetivo del 0,7 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB) en 2012 en ayuda oficial al desarrollo.

"Mantenemos pues nuestros compromisos, a pesar de las actuales dificultades económicas, que nosotros también, por supuesto, atravesamos", afirmó ante los líderes del G-8, el G-5, Egipto, Australia, Corea del Sur, Indonesia, Dinamarca, Holanda, Turquía, y varios países africanos, además de los representantes de las principales organizaciones internacionales.

Finalmente, Zapatero aseguró que el tema de la lucha contra el hambre será una de las prioridades de la presidencia española de la Unión Europea, que empezará a partir del próximo mes de enero.

Además de Zapatero, intervinieron en esta reunión el primer ministro de Italia, Silvio Berlusconi, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, el secretario general de la ONU, Ban Ki Moon, y el presidente de Rusia, Dimitri Medvedev.

Durante su intervención, el presidente del Gobierno se dijo "honrado y satisfecho" por haber tenido la oportunidad de hablar ante este foro, hecho que atribuyó "al esfuerzo que, en la medida de sus posibilidades", está realizando España "en los últimos años en la lucha contra el hambre y la pobreza".

EUROPA PRESS