El misionero de EEUU Robert Park, detenido el pasado 24 de diciembre tras entrar en Corea del Norte a través de la frontera con China, fue puesto en libertad, informó hoy la agencia surcoreana Yonhap.

Park llegó hoy a Pekín tras su liberación, concedida por su "sincero arrepentimiento", según las autoridades de Pyongyang, que aún mantienen detenido a otro estadounidense desde el pasado 25 de enero por entrada "ilegal" en el país.

El misionero, de 28 años, había entrado desde China en Corea del Norte con el objetivo declarado de entregar una carta al líder norcoreano, Kim Jong-il, en la que le pedía el cierre de los campos de trabajo de su país.

Park, de origen coreano, es miembro de uno de los grupos cristianos que han condenado la situación de los derechos humanos en Corea del Norte.

Su liberación se produce en medio de los esfuerzos internacionales para que el régimen de Pyongyang retome las negociaciones para su desnuclearización, bloqueadas desde diciembre de 2008.

La semana que viene viajará a la capital norcoreana el vicesecretario general de la ONU para Asuntos Políticos, Lynn Pascoe, a fin de dar un impulso a este diálogo.

La detención de Park el día de Navidad fue la tercera de un ciudadano de EEUU el año pasado en Corea del Norte, después de que dos periodistas de la misma nacionalidad fueran detenidas en marzo en la frontera con China mientras grababan imágenes para un documental.

Ambas fueron liberadas en agosto gracias a la mediación del ex presidente Bill Clinton, aunque en un principio habían sido condenadas a doce años de trabajos forzados.