Washington, Efe

El presidente de EE UU, Barack Obama, pidió ayer al Congreso el desbloqueo de 205 millones de dólares para el despliegue de un sistema de defensa antimisiles en Israel, según informó la Casa Blanca. El sistema está destinado a proteger a Israel de ataques de los grupos radicales islámicos Hamás o Hezbolá, que operan desde Gaza y Líbano, respectivamente.

El anuncio ha sido interpretado como un premio a Israel, ya que se produce tras el inicio, esta semana, del diálogo indirecto entre israelíes y palestinos, bajo la mediación del enviado especial de EE UU, George Mitchell.

El diálogo, cancelado desde la invasión israelí de Gaza en diciembre de 2008, iba a haberse reanudado, según anunció EE UU, en marzo pasado, pero fue aborto tras anunciar Israel la construcción de 1.600 viviendas en Jerusalén Este durante una visita al país del vicepresidente de EE UU, Joe Biden.

El anuncio israelí dio pie a fuertes tensiones bilaterales, que culminaron en una catastrófica visita del «premier» israelí, Benjamin Netanyahu, a Washington, pero se han suavizado en las últimas semanas, tras alcanzar las partes un «pacto secreto» para congelar los asentamientos.