Bruselas, Efe

Los países miembros de la UE acordaron ayer conceder a Serbia el estatus de país candidato a la adhesión, después de que Rumanía diese finalmente su aprobación. Las últimas negociaciones se prolongaron durante horas por la insistencia de Rumanía en exigir a Serbia más garantías sobre la protección de los derechos de la minoría valaca de origen rumano que vive en el país.

La semana pasada Belgrado dio el definitivo paso de gigante al aceptar una fórmula para que Kosovo -que se independizó unilateralmente de Serbia- pueda tener voz propia en foros internacionales.

El pacto alcanzado ayer por los ministros de Asuntos Europeos será rubricado por los jefes de Estado y de Gobierno de los Veintisiete en la cumbre que celebrarán en Bruselas mañana y pasado. Con este paso, Serbia se acerca a sus aspiraciones de integrarse en la UE, prácticamente paralizadas durante años, y estará en disposición de abrir en un futuro próximo negociaciones para la adhesión a la UE.

Según el comisario europeo de Ampliación, Stefan Füle, el estatus de candidato abre una «nueva era» en las relaciones entre la UE y Serbia. La decisión de los Veintisiete supone además un importante empujón para el Gobierno proeuropeo de Boris Tadic, que ha apostado gran parte de su crédito a lograr un acercamiento con la UE. Finalmente, el texto acordado «recomienda» a los líderes de la Unión dar el paso con Serbia, con una pequeña variación del lenguaje previsto inicialmente, que era más explícito.