Al menos dos personas han muerto y otras 20 han resultado heridas por la explosión de un coche bomba detonado por un supuesto terrorista suicida en el centro de la ciudad de Deraa, en el sur del país, informó la agencia oficial siria Sana.

Según el corresponsal de Sana en Deraa, ciudad donde comenzaron las protestas contra el régimen sirio hace casi un año, hay civiles y miembros de las fuerzas de seguridad entre las víctimas de la explosión, que produjo daños materiales en edificios y comercios.

El presunto terrorista conducía el coche que hizo estallar en la rotonda Al Masri, en el área de Deraa al Balad, agregó la fuente.

Este ataque se suma a otros atentados terroristas que han sacudido Siria en los últimos meses, principalmente en Damasco y Alepo.

Al menos 28 personas perdieron la vida y 235 sufrieron heridas el pasado 10 de febrero en un doble atentado perpetrado con coches bomba contra dos sedes de la Agencia de Inteligencia de la Policía Militar y de las fuerzas antidisturbios en Alepo, la segunda ciudad de Siria y la más importante del norte.

Mientras, en Damasco más de una veintena de personas perdieron la vida en otro ataque suicida junto a una comisaría en el barrio de al Midan.

Todavía existe confusión acerca de la autoría de estos atentados suicida, que el Gobierno sirio atribuye a "grupos terroristas que cuentan con el apoyo de países árabes y occidentales".

Esta semana, un grupo radical islámico hasta la fecha desconocido autodenominado "Yebha al Nasra" (Frente de la Victoria) asumió a través de un mensaje en internet la autoría de los atentados cometidos a principio de año en Alepo y Damasco

Mientras, al menos 61 personas, entre ellas varios menores de edad y dos mujeres, murieron este viernes en Siria a manos de las fuerzas leales al régimen de Bachar al Asad -la mitad de ellas en la provincia central de Homs-, según grupos opositores.

De acuerdo con su testimonio, al menos 16 ciudadanos perdieron la vida en la localidad de Rastan, en Homs, la mayoría de ellas a causa de un bombardeo con proyectiles de mortero contra una protesta iniciada tras la oración comunitaria del viernes.

La red opositora Comités de Coordinación Local denunció, asimismo, que al menos 14 personas fueron ejecutadas por las fuerzas del Estado en Baba Amr, barrio de Homs tomado el jueves por una unidad de elite del Ejército sirio tras cuatro semanas de intensos bombardeos.

El Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) no pudo acceder este viernes a la citada barriada, una de las más pobres de la ciudad, como tenía previsto tras haber recibido la autorización del régimen sirio.

La violencia se extendió este viernes igualmente a la provincia septentrional de Idleb, donde combate el denominado Ejército Libre Sirio (ELS), brazo armado de la oposición.

Al menos 11 personas murieron en esa región fronteriza con Turquía, dos de ellas en la localidad de Saraqeb y el resto en la capital.

También se registraron víctimas mortales en las provincias de Deir al Zur (noreste), Alepo (norte), Rif Damasco (junto a la capital), Hama (centro) y Latakia (noroeste).

El pasado martes, la ONU cifró en más de 7.500 las víctimas mortales habidas en Siria desde que hace un año comenzaran las protestas de la población, reprimidas violentamente por el régimen, aunque reconoció que en estos momentos no puede ofrecer un número exacto de muertos.