El régimen de Bachar al Asad ha desplegado en Homs a las tropas de la división acorazada de élite, conocidas como los 'Monstruos de la Cuarta División', al tiempo que los distritos rebeldes de la ciudad han sufrido los bombardeos más intensos desde que comenzara la ofensiva hace tres semanas. Por su parte, la ONU ha asegurado que el cálculo aproximado de víctimas mortales desde el conflicto podría estar "muy por encima de 7.500". Y aunque el CICR ha conseguido hacer llegar ayuda a Homs e Idlib, ha reclamado una tregua humanitaria con el fin de ayudar a los afectados.

La violenta situación en Siria sigue recrudeciéndose después de que Bashar al Asad haya desplegado este martes en Homs (oeste) a las tropas de la división acorazada de élite comandada por el hermano del presidente, Maher al Asad.

Los carros de combate y las tropas de la Cuarta División se desplazaron el lunes por la noche por las principales calles que rodean la zona sur del asediado distrito de Baba Amro. Los tanques llevan emblemas pintados con el lema 'Monstruos de la Cuarta División'.

Este despliegue no ha sido confirmado por fuentes independientes. Las autoridades sirias restringen duramente el acceso de los medios de comunicación al país.

Mientras tanto, el secretario general adjunto de la ONU para Asuntos Políticos, Lynn Pascoe, ha elevado este martes ampliamente el cálculo aproximado de víctimas mortales por la represión del Gobierno en Siria y ha dicho que podría estar "muy por encima de 7.500".

Hasta ahora, Naciones Unidas siempre ha mantenido un balance de muertos por debajo del de algunos activistas que sí habían advertido de más de 7.000 fallecidos desde marzo del año pasado, fecha en la que arrancó la revuelta contra el régimen de Bashar al Asad.

Por su parte, la Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Navi Pillay, había declarado que 5.400 personas perdieron la vida el año pasado por acciones de las fuerzas leales al Gobierno sirio. En las últimas semanas el asedio sobre determinadas zonas, principalmente la ciudad de Homs, se ha intensificado y, con él, cada día diversas organizaciones informan de decenas de muertos más.

Por otro lado, el Centro de Documentación de Violaciones de Derechos Humanos sirio (CDV) ha elevado a 7.043 el número de civiles fallecidos en el país desde el inicio de la represión, al tiempo que ha señalado que, por parte del Ejército han perdido la vida 1.783 personas, lo que deja la cifra de víctimas por el conflicto en 8.845.

La represión de las fuerzas de seguridad ha acabado con la vida de 610 niños muertos, en su mayoría varones (484). La mayoría de víctimas de la represión gubernamental y de los enfrentamientos entre leales y detractores de Al Asad son hombres, un total de 7.937 fallecidos, frente a 278 mujeres.

Por zonas, la región más golpeada por la acción de las fuerzas del régimen es la provincia de Homs, que acumula 3.173 muertos, seguida por Hama, con 1.164 fallecidos, Idlib, con 1.142, y Damasco, que ha sufrido 985 víctimas mortales en la ciudad y en sus suburbios.

Mientras tanto, los Comités de Coordinación Local hablan este martes de otra "masacre" en Homs, de nuevo en el barrio de Baba Amro. Y es que alrededor de un centenar de personas han muerto en Siria a manos de las fuerzas leales al régimen.

En concreto, la red opositora tiene constancia de 35 "mártires" en Baba Amro tras "el bombardeo del régimen". "Más de 150 personas se encuentran heridas, algunas de ellas en estado crítico", según ha informado en un comunicado.

La cifra, sin embargo, podría aumentar, ya que los ataques continúan y "muchas" personas se encuentran atrapadas bajo los escombros de edificios destruidos.

De acuerdo con este grupo opositor, medio centenar de personas han fallecido en la ciudad de Homs, mientras que otras 27 han perdido la vida en los suburbios de la ciudad de Hama. Además, ha habido 6 muertos en Alepo (oeste), 5 en zonas aledañas a Idlib (norte) y 3 en Deir al Zor.

Además, fuentes opositoras citadas por Reuters habían denunciado que al menos 20 personas han muerto como consecuencia de un bombardeo de las fuerzas gubernamentales contra una localidad de la provincia de Hama, Helfaya, que se ha convertido en un importante enclave de la oposición al régimen sirio.

Las fuerzas del régimen han atacado la localidad desde dos posiciones, según estas fuentes. Los activistas también han asegurado que el entorno rural de Hama sufre bombardeos todos los días.

Tras el llamamiento público que hizo el Comité Internacional de la Cruz Roja la semana pasada para lograr que cada día haya dos horas de cese de los enfrentamientos, este martes ha conseguido hacer llegar alimentos y otros suministros a Homs e Idlib pero ha subrayado que la Media Luna Roja Árabe Siria necesita mejores condiciones de seguridad en ambos lugares para poder distribuirla.

Así las cosas, el organismo internacional ha reclamado la aplicación de una tregua humanitaria en Siria con el fin de que haya una "ventana diaria" para poder facilitar ayuda a los afectados por la violencia en el país.

Esta organización ha dicho que es fundamental que tanto las autoridades de Siria como los grupos de oposición estén de acuerdo en implementar un alto al fuego que permita la entrega de ayuda vital.

Y es que ni el CICR ni los voluntarios de la Media Luna Roja Árabe Siria han sido capaces de entrar en el barrio Baba Amro de Homs sitiada por las fuerzas sirias, ha dicho Hassan.

Por eso, la organización internacional ha llevado comida suficiente para alimentar a varios miles de personas durante un mes, así como mantas, jabón y otros materiales de higiene, ha añadido Hassan.