El enviado de la ONU y la Liga Árabe para Siria, Kofi Annan, se reunirá mañana en Damasco con el presidente sirio, Bachar al Asad, en su primer día en el país árabe para promover el diálogo entre el Gobierno y la oposición, anunció hoy el secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon.

Ban confirmó el encuentro entre Annan y Al Asad y anunció que el diplomático africano también se reunirá con representantes de la sociedad civil, mientras que con los líderes de la oposición siria se entrevistará una vez que abandone el país.

El secretario general de la ONU informó a un grupo de corresponsales en la sede de Naciones Unidas de los detalles del encuentro después de mantener una conferencia a tres bandas con el secretario general de la Liga Árabe, Nabil al Arabi, y con el propio Annan, antes de que éste parta hacia Siria.

"Los tres compartimos las mismas preocupaciones y las mismas prioridades. La primera de ellas es detener la violencia, por lo que ante todo he pedido enérgicamente a Annan que se asegure de lograr un alto el fuego inmediato", explicó Ban.

El máximo responsable de Naciones Unidas señaló que lo ideal sería lograr ese alto el fuego entre las autoridades sirias y las fuerzas de la oposición al mismo tiempo, pero indicó que, de no ser posible, las fuerzas del Gobierno deberían ser las primeras en detener los ataques.

"Después les tocaría a las fuerzas de la oposición", señaló Ban, para quien el cese de la violencia es el primer paso para que se inicie "un diálogo político sin exclusiones" en el país árabe, la segunda de sus prioridades.

También pidió a su predecesor en el cargo que exhorte al presidente a Al Asad a "facilitar el acceso de la ayuda humanitaria" al país, como ha solicitado ya a las autoridades la subsecretaria de Asuntos Humanitarios de la ONU, Valerie Amos, tanto en persona como por escrito.

Annan reducirá su primera visita a Siria como enviado especial a Damasco, donde, además de con Al Asad, se reunirá "con funcionarios de su gobierno, líderes de la sociedad civil, miembros de la comunidad humanitaria y con cualquiera que considere necesario" para facilitar el fin de la violencia.

El que fuera secretario general de la ONU entre 1997 y 2006 abandonará Damasco el domingo, tras lo cual se reunirá con los líderes de la oposición fuera ya del país y tratará de visitar otras naciones de la región que todavía están por determinar, según los datos de los que dispone hasta ahora el diplomático surcoreano.

Ban también habló de la visita de Amos a Siria y señaló que la jefa humanitaria de la ONU y las autoridades están de acuerdo en que se despliegue "una misión de ayuda humanitaria" en el país, aunque "no les dio tiempo" a consensuar los detalles de la misma.

Annan fue elegido enviado especial el pasado febrero para que medie en el conflicto sirio después de que la Liga Árabe retirase en enero a sus observadores de Siria y de que el Consejo de Seguridad haya sido incapaz en un año de reaccionar mediante una resolución a las acciones del régimen de Al Asad.

Más de 7.500 personas han muerto en Siria en los más de once meses que dura la rebelión contra el régimen de Al Asad, según datos de la ONU, aunque los grupos opositores calculan que esta cifra sobrepasa los 8.500.