El presidente sirio, Bachar al Asad, afirmó hoy que ningún diálogo político puede tener éxito mientras haya grupos terroristas armados que propagan el caos, durante una reunión en Damasco con el enviado de la ONU y de la Liga Árabe, Kofi Annan.

"Ningún diálogo o proceso político puede tener éxito mientras existan grupos terroristas armados que trabajan para propagar el caos y la inestabilidad en el país atacando a civiles, militares y saboteando propiedades públicas y privadas", dijo Al Asad, según la agencia de noticias oficial siria, Sana.

Para Al Asad, el éxito de cualquier esfuerzo para solucionar la crisis requiere que primero se estudie la situación sobre el terreno y que se ponga fin "a lo que promueven algunos países regionales e internacionales para tergiversar los hechos y presentar una imagen distinta de lo que ocurre en Siria".

Por su parte, Annan le explicó a Al Asad su visión de la crisis y destacó su compromiso para trabajar de una manera "justa, imparcial e independiente", además de su rechazo a una injerencia extranjera en los asuntos sirios.

Annan expresó su esperanza de que pueda trabajar con el Gobierno sirio para lanzar un diálogo pacífico dentro de un proceso político, que devuelva la estabilidad a Siria y cumpla con las aspiraciones de su pueblo, indicó Sana.

Annan llegó hoy a Siria en su primera visita desde que fue nombrado a finales de febrero pasado enviado conjunto de la ONU y de la Liga Árabe.

Tras el encuentro con Al Asad, mantuvo un almuerzo de trabajo con el titular de Exteriores sirio, Walid al Mualem, en un restaurante en el casco histórico de la capital.

Aparte de reunirse con las autoridades, Annan tiene previsto mantener contactos con representantes de la sociedad civil, mientras que con los líderes de la oposición lo hará una vez que abandone el país.

El opositor Abdelaziz al Jair, miembro del órgano ejecutivo de la llamada "oposición interna", el Consejo de Coordinación Nacional, ha anunciado que se entrevistará hoy con Annan.

Fuentes diplomáticas revelaron a Efe que la siguiente parada del emisario de la ONU y de la Liga Árabe será Turquía, cuando finalice su visita a Siria mañana.

Mientras Annan está en Siria, los ministros árabes de Exteriores se reúnen hoy en El Cairo con su homólogo ruso, Serguéi Lavrov, quien insistió en el rechazo de su país a una intervención militar extranjera en territorio sirio.

Rusia ha vetado junto con China en varias ocasiones las resoluciones de condena al régimen sirio en el Consejo de Seguridad de la ONU y es actualmente uno de los principales aliados de Damasco frente al rechazo de la represión gubernamental contra los opositores por parte de la comunidad internacional.

Según los datos de la ONU, más de 7.500 personas han muerto desde el inicio de las protestas hace un año, mientras que el régimen de Damasco asegura que más de 2.000 soldados y efectivos de seguridad han muerto por la acción de "grupos armados".