Un granjero tibetano, Sonam Thargyal, ha muerto este sábado tras prenderse fuego para protestar por el dominio chino sobre Tíbet, según ha informado el grupo de defensa de Derechos Humanos con sede en Londres Free Tibet (Tíbet Libre).

Varios millares de tibetanos han participado en el funeral de Thargyal, que se ha convertido en la tercera persona que se prende fuego en protesta en los últimos cuatro días y la número 30 en el plazo de un año. Al menos una veintena de ellas han muerto, según activistas.

Sonam, padre de tres hijos, tenía 44 años de edad cuando se prendió fuego en la mañana del sábado cerca del centro de la localidad de Rongwo, en el condado de Tongren, provincia de Qinghai, informa Free Tibet.

El hombre bebió y se roció queroseno por encima, empapando el algodón que se había atado previamente con alambres. Enseguida se prendió fuego y falleció en cuestión de minutos, informa Radio Free Asia citando fuentes del propio lugar. Antes de morir dio varios gritos contra el control chino de Tíbet y a favor de la vuelta del líder espiritual tibetano, el Dalai Lama.

Tras su muerte, unos 7.000 tibetanos se congregaron en el monasterio budista donde fue incinerado su cuerpo. Tras la ceremonia hubo una marcha hasta el centro de Rongwo para exigir libertad, según Radio Free Asia.

China ha criticado la práctica de la autoinmolación, considera formalmente "terroristas" quienes se prenden fuego y rechaza las acusaciones de colonización y acoso a la cultura y el idioma tibetanos.