Una multitud de egipcios despidió ayer al papa de la Iglesia copta Shenuda III, en la catedral cairota de Abasiya, donde el caos de la aglomeración causó la muerte de al menos tres personas y heridas a 40. La capilla ardiente se instaló en la catedral con el cuerpo del líder religioso sentado en la llamada Silla de San Marcos, en la foto, quien difundió el cristianismo en Egipto.