Los rebeldes sirios entrenados por Estados Unidos para que luchen contra el grupo yihadista Estado Islámico, División 30, han tenido un mal debut, con doce de ellos secuestrados, entre ellos su líder, y dieciocho heridos de un grupo de 45, en menos de una semana. Por otro lado, aumenta a 240.000 la cifra de muertos en el conflicto de Siria desde su inicio hace más de cuatro años.