El condado de Saint Louis ha declarado el estado de emergencia en la localidad de Ferguson por las protestas que se han producido en los últimos días con motivo del primer aniversario de la muerte de Michael Brown.

"A la luz de la violencia de la última noche en Ferguson y su potencial para causar daños a personas y propiedades, he decidido usar mi autoridad para declarar el estado de emergencia con efecto inmediato", ha dicho el jefe del condado de Saint Louis, Steve Stenger.

Stenger ha aclarado que "los actos de violencia no serán tolerados en una comunidad que ha trabajado incansablemente durante el último año para reconstruirse". "Lo invertido en Ferguson no será destruido por unos pocos que quieren violar los derechos de los demás", ha afirmado.

El encargado de gestionar la "operación de emergencia" en Ferguson será el jefe de la Policía de Saint Louis, Jon Belmar, que podrá "ejercer todos los poderes necesarios para preservar el orden y proteger la vida y las propiedades de los ciudadanos".

Los disturbios estallaron el domingo por la noche cuando después de la llamada 'marcha del silencio' que tuvo lugar por las calles de Ferguson para conmemorar el primer aniversario de la muerte de Brown, un joven afroamericano, a manos de Darren Wilson, un policía blanco.

Según la versión de la Policía, dos grupos de agitadores se enfrentaron entre sí obligando a intervenir a los agentes, lo que desató un tiroteo en el que se dispararon más de 40 balas. "Eran criminales, no manifestantes", dijo Belmar en una rueda de prensa.

En el marco de los enfrentamientos, un hombre armado identificado como Tyrone Harris, de 18 años, entró en una tienda y cuatro agentes le persiguieron dando lugar a otro intercambio de disparos en el que resultó herido de gravedad. La Fiscalía de Misuri le ha imputado cuatro cargos de asalto a las fuerzas del orden.

Además, un policía resultó herido en la cara por el impacto de un ladrillo lanzado por los manifestantes y otras dos personas tuvieron que recibir atención médica por el gas pimienta empleado por el cuerpo de seguridad.

Los organizadores de la 'marcha por el silencio' han adelantado que, tras los incidentes del domingo por la noche, planean celebrar "un día de resistencia pasiva" en Ferguson y otras ciudades para llamar la atención sobre la violencia policial contra las minorías raciales.