Décimo día de violencia en Israel y Palestina. En una jornada de apuñalamientos, masivos disturbios y protestas, ayer murieron al menos cinco palestinos -tres de ellos menores de edad- y decenas de personas resultaron heridas. En esta última intifada, o revuelta popular palestina, ya han caído cuatro israelíes y 19 palestinos en Cisjordania, Gaza y ciudades israelíes.

La jornada sabática de descanso en Israel quedó alterada bien temprano por la mañana. Dos judíos ultraortodoxos que regresaban del Muro de las Lamentaciones fueron apuñalados por un joven de 16 años en la zona de Jerusalén donde confluyen las poblaciones israelí y palestina. La policía israelí le abatió a tiros.

Horas después, otro palestino de 19 años perdía la vida al atacar a una patrulla policial israelí que le había requerido la tarjeta de identidad. Otros dos palestinos, menores de 13 y 15 años, murieron en enfrentamientos a lo largo de la frontera entre Gaza e Israel, en los que palestinos volvieron a acercarse a la verja fronteriza para arrojar piedras y cócteles molotov. El quinto muerto es un palestino herido el viernes.