Los asturianos que residen en París vivieron con inquietud y temor la masacre terrorista en la capital gala. La mayoría permanecieron ayer encerrados en sus casas con miedo a salir por si los ataques se repetían. En lo que coinciden es que en las calles, ayer casi completamente vacías, se respiraba bastante inquietud y desasosiego. Muchos de ellos reconocían estar asustados y aseguran que hay bastante temor por las consecuencias futuras.