Un portavoz del Ejército estadounidense, Steve Warren, calificó ayer de "desautorizado e inapropiado" el uso de unos parches militares de las Unidades de Protección Popular (YPG) kurdas por parte de miembros de las fuerzas especiales estadounidenses en Siria, un hecho que Turquía criticó duramente el viernes.

No es inusual que las fuerzas especiales estadounidense porten insignias de fuerzas aliadas, pero Warren admitió que en este caso era inapropiado llevarlas, dada "la sensibilidad política" del asunto.

Washington tiene desplegados más de 200 efectivos de fuerzas especiales en el norte de Siria, donde dicen estar asesorando a las Fuerzas Democráticas Sirias, que están formadas mayoritariamente por combatientes de las YPG, a los que Ankara considera terroristas próximos al PKK.