El FBI descubrió unos 15.000 correos electrónicos más de la ahora candidata demócrata, Hillary Clinton, en el marco del caso que investiga por el uso privado de su correspondencia electrónica mientras estuvo al mando de la secretaría de Estado. Estos documentos no se encuentran entre los 30.000 que se entregaron en 2014 al Departamento de Estado.