La Policía Militar de Río de Janeiro ha informado este lunes de que ha detenido a dos efectivos de las fuerzas de seguridad en el marco de la investigación sobre la muerte por disparos de una turista española en la favela de Rocinha, en el sur de la localidad, cuando el vehículo en el que viajaba se saltó un control de seguridad, según ha informado Agencia Brasil.

"Después del análisis del hecho, el Ministerio Público Militar de Río de Janeiro tendrá que decidir el rumbo de la investigación", han aseverado en un comunicado las fuerzas de seguridad del país, que han señalado que en torno a las 10.30 (hora local) el vehículo se saltó el control ubicado en Largo Boiadeiro y los agentes, sin saber quién iba en su interior, respondieron abriendo fuego.

Asimismo, el documento afirma que la Policía Militar, así como las demás fuerzas del país, están siguiendo los procedimientos establecidos en el Manual de Enfoque, que señala que los policías no deben disparar en este tipo de situaciones sino perseguir el vehículo problemático en cuestión y bloquear su paso tan pronto como sea posible.

La mujer, de 67 años, fue trasladada al Hospital Municipal Miguel Couto, donde murió. Además de la fallecida, a bordo del vehículo iban otros dos españoles y un italiano, si bien no han trascendido sus identidades.

Poco antes de este incidente, en torno a las 9.30, policías militares del Batallón de Choque se habían enfrentado con miembros de un grupo criminal en la misma zona y varios agentes resultaron heridos.

El responsable de Homicidios de Río de Janeiro, departamento que ha quedado a cargo de la investigación, Fabio Cardoso, ha explicado que las primeras investigaciones apuntan a que el conductor no vio el control.

Pese a la versión policial, los ocupantes del vehículo que fue tiroteado niegan que el coche rompiese "el bloqueo policial" y rechazaron que hubiera cualquier tipo de control.

El hermano y la cuñada de la víctima, María Esperanza Ruiz Jiménez, así como el conductor del vehículo, de nacionalidad italiana, y la guía, brasileña, declararon hoy ante la Policía Civil de Río de Janeiro y contradijeron la versión dada por la Policía Militarizada, explicaron fuentes oficiales.