Este sábado los principales candidatos a la Presidencia de Turquía han cerrado la campaña electoral con sendos actos y el favorito, el aspirante a la reelección, Recep Tayyip Erdogan, ha elogiado la nueva configuración que dota de mayores competencias al presidente.

"Si Alá quiere, Turquía empezará a volar con este sistema (...). Con este sistema vamos a conseguir lo que los demás no pueden siquiera imaginar", ha afirmado ante decenas de miles de simpatizantes en el barrio de Esenyurt de Estambul en el primero de los cinco actos previstos para este sábado.

Erdogan, de 64 años, ha prometido además nuevos proyectos de calado en infraestructura, uno de los rasgos fundamentales de su mandato de 15 años en los que se ha convertido en el líder más carismático pero también el más odiado de la historia moderna de Turquía.

"La estabilidad es lo más importante. Está por encima de todo. Creo que con el cambio de sistema las decisiones serán mucho más rápidas y la economías será más fuerte", ha opinado Mehmet Engin, un vendedor de muebles.

El candidato mejor posicionado de la oposición es Muharrem Ince, del Partido Republicano del Pueblo (CHP), quien ha conseguido atraer a importantes multitudes en sus actos en las ciudades. Este sábado al menos un millón de personas han participado en su mitin en Maltepe, también en Estambul.

Ince ha prometido de nuevo acabar con el sistema presidencialista si es elegido y ha acusado de nuevo a los medios públicos de favorecer a Erdogan en su tratamiento de la información por no retransmitir los actos de la oposición.

"Nuestro país necesita sangre fresca como la de Muharrem Ince. Por eso estoy aquí", ha argumentado una simpatizantes de Ince, Nuray Ugurlu, de 54 años, quien ha destacado que es el primer acto político al que acude en su vida.

Elecciones anticipadas

Las elecciones, convocadas de manera anticipada en abril por Erdogan, supondrán el pistoletazo de salida a un sistema presidencialista aprobado por escaso margen en un referéndum celebrado en 2017. Este sistema otorgará al presidente amplios poderes y eliminará la figura del primer ministro, lo que los críticos han considerado como un intento de Erdogan de acumular aún más poder en sus manos en caso de hacerse con la victoria en los comicios.

Entre las competencias que tendrá el presidente a raíz del referéndum figuran la designación y destitución de altos cargos sin necesidad del visto bueno parlamentario, además de la potestad de emitir decretos con fuerza de ley sobre distintas cuestiones sociales, económicas e incluso políticas.

Además, el presidente podrá ser miembro e incluso líder de un partido político. En caso de que el vencedor sea Erdogan, podrá además aspirar a permanecer en el cargo hasta 2028, ya que establece un límite de dos mandatos de cinco años a contar desde el inicio de la aplicación de las enmiendas.

Cerca de 50,5 millones de personas están llamadas a las urnas en estas elecciones clave --entre ellas más de tres millones residentes en el extranjero que votaron entre el 7 y el 19 de junio--, con la participación como uno de los aspectos más importantes en la contienda.