El secretario de Estado de EE UU, Mike Pompeo, reconoció ayer que Corea del Norte sigue produciendo "materiales fisibles" que podrían usarse para la fabricación de misiles nucleares, pese al diálogo que el régimen de Kim Jong-un mantiene actualmente con Washington sobre la desnuclearización de la península de Corea.

Pompeo reveló esta información en una comparecencia ante el Comité de Relaciones Exteriores del Senado en la que aclaró que la diplomacia estadounidense tendrá "paciencia" pero no ilimitada con Pyongyang. "Estamos comprometidos con una diplomacia paciente, pero no permitiremos que nos arrastren sin fin", afirmó el Secretario, asegurando que el objetivo de la Casa Blanca sigue siendo la "desnuclearización completa y verificada" de la península coreana antes de 2020, cuando concluiría el primer mandato del presidente Trump.

Aunque el hecho de que Corea del Norte esté produciendo materiales fisibles, entre los que se incluye el uranio enriquecido, no significa que los esté desviando necesariamente a fines militares, las dudas pesan sobre la verdadera naturaleza de la desnuclearización norcoreana. Mientras el supuesto desmantelamiento de su base de misiles de Sohae se produce ante la ausencia de observadores internacionales, varios medios estadounidenses publicaron a finales de junio que Pyongyang estaría tratando de ocultar buena parte de su arsenal y reservas.