Los ataques de brasileños contra campamentos de inmigrantes venezolanos en la ciudad fronteriza de Pacaraima provocaron que 1.200 personas abandonen el país y eleva la tensión en la región. Vecinos de esta pequeña localidad de 12.000 habitantes, en el empobrecido estado de Roraima, expulsaron a las venezolanos de las tiendas de campaña donde sobreviven y las quemaron junto con sus objetos personales. En la foto, venezolanos hacen cola en un puesto fronterizo en Pacaraima para retornar a su país.