Unos 104 millones de bangladesíes estaban hoy llamados a votar en las elecciones generales que decidirán quién gobernará el país durante los próximos cinco años, una jornada marcada por violentos incidentes que causaron al menos 19 muertos y que, según la gobernante Liga Awami, transcurrió "de forma festiva".

"Las elecciones se desarrollaron de forma festiva y pacífica, los comicios de hoy son históricos desde cualquier perspectiva. Ha habido violencia esporádica, y al menos 13 personas han muerto, lo que es muy desafortunado", zanjó en una comparecencia ante los medios Abdur Rahman, el secretario general adjunto de la Liga Awami.

La formación de la actual primera ministra, Sheikh Hasina, acusó al principal partido de la oposición, el Partido Nacionalista de Bangladesh (BNP), de "crear el caos en todo el país de forma organizada" y de atacar a seguidores y líderes de la Liga Awami.

El secretario de la Comisión Electoral, Helal Uddin Ahmed, también transmitió una imagen de calma tras el cierre de los colegios a las 16.00 hora local (10.00 GMT).

"De los 40.000 centros electorales, en 22 la votación se ha pospuesto por irregularidades. En el resto de los centros, la votación transcurrió de forma pacífica y con una gran participación de los electores", dijo Ahmed.

Por su parte, la coalición de partidos opositores encabezada por el BNP presentó una imagen bien diferente de la del partido gubernamental.

"Nuestros agentes (electorales) han sido expulsados de muchos centros, los candidatos han sido asediados. Hemos visto esta imagen de las elecciones, y se ha hecho con la ayuda de algunos miembros de las fuerzas de seguridad demasiado entusiastas", denunció ante los medios de comunicación el secretario general adjunto del BNP, Moazzem Hossain Alal.

El político denunció que la oposición ha detectado irregularidades en el voto de 221 de los 299 escaños parlamentarios sometidos a escrutinio público.

Desde el inicio oficial de la campaña electoral el pasado 8 de noviembre y hasta el día de la votación, el BNP ha denunciado que más de 10.000 líderes y activistas de la formación fueron detenidos y se produjeron 2.896 ataques contra los opositores, que han causado nueve muertos y más de 13.000 heridos.

Durante la jornada electoral perdieron la vida al menos 17 personas en todo el país, a los que se suman dos fallecidos de madrugada por choques entre partidarios de formaciones de distinto signo.

"Hemos recibido información de 17 muertes hoy en episodios violentos relacionados con las elecciones. Las víctimas también incluyen miembros de las fuerzas de seguridad. Por el momento, estamos intentando recabar más detalles", manifestó a Efe un portavoz de la Policía bangladesí que pidió el anonimato.

Entre las víctimas mortales de la jornada electoral figura un partidario del opositor BNP falleció en el distrito oriental de Comilla tras haber recibido un disparo de la Policía cuando trató de robar una urna en un colegio electoral, manifestó a Efe el subinspector de Policía de la zona donde se produjo el incidente, Wahid Ripon.

En ese mismo distrito, un simpatizante de la coalición opositora Frente Jatiya Oikya, liderada por el BNP, fue mortalmente acuchillado por un rival político, dijo a Efe el jefe de Policía de Langolkot, Nazrul Islam.

Los comicios se desarrollaron en medio de un fuerte dispositivo de las fuerzas de seguridad, después de que las autoridades movilizasen el pasado 24 de diciembre a más de 600.000 efectivos, entre ellos del Ejército, la Marina y la guardia fronteriza.

Además, y para evitar la difusión de rumores, el Gobierno ordenó la suspensión de los servicios de telefonía móvil e internet durante la jornada electoral.

Hasina aparece como la favorita para ganar los comicios y repetir mandato; mientras que el opositor BNP, de la ex primera ministra bangladesí Khaleda Zía encarcelada tras ser condenada a 17 años por corrupción, aspira recuperar el poder.

Estas elecciones representan el regreso de los opositores a la lucha por el poder a través de las urnas, después de que en 2014 los partidos de la oposición, entre ellos el BNP, boicotearan las elecciones.

No obstante, el mayor partido islamista de Bangladesh, Jamaat-e-Islami (JI) -que se presentó bajo el amparo del BNP tras ser vetado por un tribunal-, anunció que boicotearía los comicios.

"No podemos involucrarnos en este proceso ilegal, y es por ello que nuestros candidatos que se presentan bajo el símbolo de 'la planta de arroz' (que identifica al BNP) han rechazado y boicoteado las votaciones en sus respectivos distritos", afirmó el secretario general de JI, Shafiqur Rahman, en un comunicado poco antes del cierre de los colegios electorales.