Los líderes demócratas del Congreso aseguraron que el presidente estadounidense, Donald Trump, con quien se reunieron este viernes por segunda vez esta semana, ha amenazado en ese encuentro con que el cierre de la Administración dure "meses o incluso años".

"Le dijimos al presidente que necesitamos un Gobierno abierto y él se resistió. De hecho, dijo que mantendría la Administración cerrada durante mucho tiempo, meses o incluso años", apuntó el líder de la minoría demócrata en el Senado, Chuck Schumer, a la salida del encuentro en la Casa Blanca.

Desde el pasado 22 de diciembre, la Administración estadounidense entró en su tercer cierre parcial de este Gobierno después de que la negociación entre republicanos y demócratas en el Congreso llegase a un punto muerto a raíz de la exigencia Trump de que el proyecto de presupuestos incluya una partida de más de 5.000 millones de dólares para financiar el muro fronterizo.

En este sentido, la nueva presidenta de la Cámara Baja, la demócrata Nancy Pelosi, que ha repetido en reiteradas ocasiones que no darán más fondos para la construcción del muro, apuntó este viernes que los demócratas están "comprometidos" con la seguridad fronteriza.

"Estamos comprometidos con mantener nuestras fronteras seguras, pero podemos hacerlo mejor cuando el Gobierno esté abierto. Se lo hemos dejado claro al presidente", indicó Pelosi a los periodistas al fin de la reunión.

"Hemos hecho algunos avances", agregó la demócrata, que no dio más detalles.

La Cámara Baja de EE.UU., liderada por Pelosi, aprobó este jueves proyectos de financiación para poner fin al cierre parcial de la Administración que no incluyen recursos para el muro fronterizo y que pasarán ahora al Senado.

Con una votación 239-192, los legisladores dieron su visto bueno a un proyecto de ley de gastos a corto plazo para financiar el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) de EE.UU. hasta el 8 de febrero.

Otro conjunto de recursos destinados a seis agencias del Gobierno de Trump hasta el próximo 30 de noviembre fue aprobado con una votación 241-190.

Las iniciativas presumiblemente no serán aprobadas por el Senado, de mayoría republicana.

La parálisis administrativa, que sumó hoy dos semanas, afecta a agencias de diez departamentos del Ejecutivo, incluyendo Transporte y Justicia, así como a decenas de parques nacionales, que suelen ser una gran atracción turística.

Además, perjudica a unos 800.000 de los 2,1 millones de trabajadores federales, que no cobrarán mientras permanezca cerrado el Gobierno de EE.UU. y que están a expensas de la aprobación de un nuevo presupuesto.